Letras de una esperanza...

Una imagen,
mil sentimientos,
un corazón escapando de este cuerpo,
era tu rostro mi siniestro,
era tu cuerpo mi desvelo,
la sangre no respira,
y mi cuerpo se estremece,
con solo mirar,
que tus ojos no logran verme,
no soñemos,
no fantaseemos,
te pido esta noche,
que no me nombres
ni recuerdes.

Olvídate de aquello que no ha sido,
olvídate de lo nuestro,
hoy te pido.

Hoy te pido,
que no me des ilusiones,
no me hables en las noches,
no me llores en rincones,
aún te amo,
pero todo esto es en vano,
tus rosas ya no huelen
tu perfume no disipo,
¡perdón!, es que necesito tu olvido,
las historias me matan,
y tus ojos... son mis lágrimas,
ya lo sé no todo esta dicho,
pero te amo,
y aquí estoy esperando,
que el viento se lleve
lo que has dejado,
o que te traiga
devuelta a mis brazos.

Recuerda,
solo recuerda,
que mi amor,
perfecto ha sido,
ha luchado por ti,
y hoy necesita marcharse,
de esta que no es su casa,
y de aquel que no fue cupido,
sino un pequeño duendecillo,
que con nosotros,
ha jugado y hoy no da respiro,
entiéndelo,
nos engañó,
nos prometió claveles,
y felicidad por doquier,
¿no te has dado cuenta?
¡te eh dicho que era un duendecillo!,
no te ilusiones,
tómalo de quien ha venido,
busca tu príncipe,
yo seguiré mi camino,
mi alma hoy te cuida
y reza para que Dios se acerque,
ten fe Él esta,
nosotros, ya no,
y hoy, amor,
no sé ni que pensar.

Observa,
mira el cielo,
allí esta la respuesta,
allí esta lo nuestro,
tenemos toda la vida para estar juntos,
si la tierra no nos deja,
y en verdad esto es amor,
no hay necesidad de tiempo,
para estar junto a vos,
nuestras almas,
son libres,
y ellas estarán juntas
si en verdad no fue un duende
y cupido ha sido.
Cierra los ojos,
para mirar nuestro infinito,
desde lo más profundo,
y decir con palabras
lo que sientes y has sentido,
cuéntame,
no me mientas,
sabes quien soy,
y no hay porque fingir,
dime que somos ángeles caídos,
y regálame una ilusión,
dime que aún me sientes en tu corazón,
a este hombre que te ama,
a esta marchita esperanza,
dale de tus besos,
resucítala,
a veces la necesito viva,
y hoy muerta esta,
dale un beso,
y probemos
si decide despertar
o no hay caso para su vida
y difunta deberá quedar.

Regálame tus palabras,
enséñame,
quiero que hoy seas
mi guru,
mi profeta,
mi Jesús,
mi padre,
mi Dios,
mi compañera...
quiero simplemente,
que seas lo que eres tú,
algo que no tiene nombre,
algo que es difícil explicar,
un poco te puedo comparar,
pero solo con mirarte
lograre expresar,
lo que en mí, formas,
lo que tu vida en mi vida esta.

Con estas palabras,
solo quería contarte,
un poco de mi propuesta,
de volvernos a amar,
de formar un contrato
sin fecha de emisión
sin fecha de caducidad,
no necesitamos firmar,
solo léela,
y dime lo más importante,
que no he escrito en vano,
y que en mis brazos piensas
que debes estar...

11-10-2008

 

Muy bonitos tus versos e intensos.

Un beso.

 

el amor se extiende, el recuerdo se acorta. el amor vive.
un abrazo
marea1