Huellas

No me busques donde se agitan los laureles,
ni en el bullicio de palmas lisonjeras.
Búscame nada mas, por las ojeras,
alejadas de bronces y oropeles.​

No me busques donde brillan los caireles
de la rima, bailando con las musas.
Búscame en las frases, mas difusas,
las que duelen, sin guirnaldas ni carteles.​

No me busques detrás de las canceles,
donde pulula la vana hipocresía.
Búscame donde debate su agonía
el amor, en calles y burdeles.​

No me busques donde mienten los pinceles
del progreso, pinturas disfrazadas.
Búscame por las espaldas congeladas,
en donde el hambre clava sus cinceles.​

No me busques por despachos ni cuarteles,
donde la guerra espera, cruel y fria.
Búscame solo en la clara melodía,
del simple pan, cantando en los manteles.​

No me busques por los altos capiteles,
donde hinca la opulencia sus rodillas;
Búscame nomás, por las capillas
donde la fe, se acurruca entre los fieles.​

No me busques en el neón de los hoteles,
donde se paga en oro el falso abrigo.
Búscame solo en la mesa del amigo,
en donde el vino, enciende cascabeles.​

No me busques endulzado por las mieles,
de discursos atacados de ceguera.
Búscame mas bien en la quimera,
de querer comprar la luna, sin papeles.​

No me busques navegando entre bajeles,
por el mar de un mundo sin memoria.
Búscame entre los perdidos y sin gloria
y allí estaré...plantando mis claveles.​

Marino Fabianesi​

 

Marino: este poema toca muy profundo porque es un homenaje a ese mundo que sufre y padece y que siendo numeroso, pasa desapercibido en su dolor. Es un homenaje al hombre sencillo, a ese que todo lo da y lo sacrifica en favor de otros que gozan a sus expensas. Tus palabras me ponen a pensar mucho porque me llega ese clamor de una manera,podría decir que casi nueva para mí, porque es una descripción descarnada y demasiado sentida, que me toca las fibras mas internas y me conmueven.Un abrazo fuerte.

 

Gracias, Clarita, Por entender estos escritos. No es resentimiento, como bien lo expresas, sino una forma de buscar enfocar la mirada hacia cuestiones que hoy requieren atención. Espero seguir disfrutando de tu maravillosa óptica. Mil abrazos, Mil besos, y mi corazón para ti...Marino.

 

Abajo, abajo está lo alto, lo grandioso, lo que pasa casi desapercibido, lo perdurable, lo mágico aún en las tristezas del olvido; en la recurrente humanidad silenciosa que espera ser reconocida; en las simplezas de lo cotidiano; en el pobre que comparte el amor de sus miserias; en los poetas soñadores que le ponen sonrisas a la luna; ahí esta lo grandioso de la vida y si algunos las vemos quizás no duela tanto la indiferencia, quizás.
Un abrazo agradecido, poeta de la sensibilidad infinita.
Daniel

 

Gracias, infinitamente gracias Dani. Es altamente gratificante sentirse cobijado por una sensibilidad como la tuya. Asi dan ganas de seguir acometiendo molinos, y de esperar eternamente, que del olmo, finalmente caiga una pera.
Un abrazo...Marino.