El rayo y el árbol

<H4 style="MARGIN: 0cm 0cm 0pt; TEXT-INDENT: 4cm">El rayo, llegó inexplicable, anónimo e inapelable,

a ese árbol en medio de la arboleda,
encandilando a la oscuridad y a la razón
sin preámbulos o excusas
construyo allí su capullo incandescente
anido unos instantes
en lo más vacío de su existencia
entre sus brazos,
entre sus hojas verde amarillas
en cada gota de su sabia.

El viejo árbol contemplo callado y absorto,
la metamorfosis de esa exhalación de luz
que se transformaba rápidamente
de suave viento a huracán devastador,
de luz blanca a centella indomable,
de paradigma a paradoja.

En esos momentos avizoró su petrificado destino
entre sombras, dudas y desengaños.
(supo que su vida no seria la misma,
pues había oído historias
[FONT=Arial]de árboles secos o destrozados
[FONT=Arial]Y hasta había visto a uno sucumbir en el horizonte,
[FONT=Arial]bajo llamas que coronaban su copa.-
[FONT=Arial]aunque en aquel momento no le importo.)

[FONT=Arial]Entonces, el candil, como se encendió se apagó
[FONT=Arial]sin mediar palabra, ni ademán…
[FONT=Arial]el látigo brillante desapareció.
[FONT=Arial]y llego la soledad en medio de la arboleda.
[FONT=Arial]llego la locura, el delirio, las conjeturas
[FONT=Arial]el miedo al desierto, al agua
[FONT=Arial]a vivir como vivía
[FONT=Arial]a ser un árbol más
[FONT=Arial]en medio de la arboleda.

[FONT=Arial]Sintió entonces un dolor inmensurable y vacío
[FONT=Arial]que continuaba más allá de sus ramas.
[FONT=Arial]Sintió un dolor húmedo de nostalgia
[FONT=Arial]mientras se desprendían cenizas
[FONT=Arial]de su corazón calcinado.

[FONT=Arial]Pero no tenia culpa el rayo
[FONT=Arial]de su naturaleza de rayo.
[FONT=Arial]No tenia culpa el árbol
[FONT=Arial]de sus brazos tendidos al cielo;
[FONT=Arial]tampoco culpen al fuego, ni al destino,
[FONT=Arial]ni a la soledad, ni al camino,
[FONT=Arial]ni al poderoso meteoro
[FONT=Arial]con su ardiente paso.
[FONT=Arial]Porque lo efímero del encuentro
[FONT=Arial]descansa eternamente en el asombro.


[FONT=Arial]El nuevo día nació como siempre
[FONT=Arial]o tan solo como ese día.
[FONT=Arial]El viento soplo como siempre
[FONT=Arial]o tan solo como ese día.
[FONT=Arial]Y el viejo árbol en medio de la arboleda,
[FONT=Arial]todavía, en la más oscura nausea nocturna,
[FONT=Arial]conformándose con luciérnagas y fugaces estrellas
[FONT=Arial]en noches de recuerdos escarchados,
[FONT=Arial][FONT=Arial]sueña cuajarse nuevamente de luminosidad y vértigo.</H4>[/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT]

 

Bienvenido,
es una bella historia hecha poema...
Un placer leerte,
saludos.​

 

gracias por tu comentario, saludos.

 

Interesante...

Gracias por compartirlo Nauseamundo.