El peligro de fumar en la cama

Insomne, como casi todas las noches, se levantó porque no soportaba más las sábanas envolviendo su cuerpo y se dirigió a la cocina con el propósito de prepararse una leche tibia. Pero su soledad pudo más y cambió la taza por una copa. Supuso que el alcohol sería mejor somnífero que la leche. La llenó, presurosa de licor y la bebió de un sorbo, así como se tragan las lágrimas del amor. Su conjuro nocturno para atraer el sueño no surtió efecto rápidamente y entonces, ella con su paquete de cigarrillos se dirigieron a la cama, sabía que ver películas no la ayudaba a retomar el letargo y el cansancio, pero no quería deambular por la casa como un fantasma.
Otra vez en su dormitorio, reclinada en varias almohadas, con las piernas cruzadas sobre ellas mismas y luego de tantear su acolchado buscando el control remoto, comenzó su aventura televisiva en búsqueda de algún film y así fue como, sin darse cuenta, encendió el primer cigarrillo que se esfumó entre sus labios ávidos y cansados. No supo tampoco cuándo fue el turno del segundo; sólo lo sintió colarse en sus manos, lo recorrió suavemente como acariciándole por entero el cuerpo; primero con una mano tosca, descubriendo volúmenes y sexo. La otra, expeditiva, se animó a recorrerlo hurgando plácida en el papel externo. Lo descubrió áspero y bello como invitándola al juego. Así se fumó el segundo, otra vez, casi sin saberlo.
El tercero aconteció mucho más lento, después de rondar por su pecho y palparle el cabello, se insinuó hasta su boca, que lo lamió por completo, disfrutando cada pliegue y el sabor de ese encuentro. Sus labios secos y sedientos buscaron al cuarto, luego de un breve receso y lo encontraron ardiente y tierno como un último beso.
Cuando se despertó, avanzado ya el día; su cama deshecha daba muestras de haber sido festejada, pero para su sorpresa no había restos de colillas, sólo una hermosa fragancia y el sopor de una resaca.

 

No hace falta Vevero, la frase: continuará. Porque tu historia está que hecha humo, dentro del fuego de la emoción. Me imagino estar viendo la volutas de ese cigarrillo voluptuoso entre esos dedos sedososos y con imsomnio, donde cada imagen que dibujas con tus letras, lo llevan auno a la cama de la susodicha, viniendo de beberse un trago espirituoso, en esa soledad de silencios, bien trazados por tu pluma, hasta el paso de la luna, en una noche que pasa en claro y revolcandose en la cama, como lo describes, con sábanas y colchas revueltas y quizás unas en el suelo. Magnifica y emocionante encuentro con tus letras, en un espacio privilegiado de la prosa. Seguiré tus huellas. Ahora no me equivoco, bella dama. Crimolem.

 

muy buena esta prosa poeta. inquietante y llena de imágenes maravillosas. despliegas un clima de ensoñación. me gusto mucho. saludos y estrellas te dejo.

 

Magnifica prosa. Me gusto como describes las sensaciones en estas lineas. No fumo y me parece estar en la habitacion acariciando el cigarrillo.
Mil estrellas!

 

Deliciosa tu prosa, amiga, para beberse de un trago. Me gusto como invitas a la imaginacion a jugar. Precioso. Sinceramente; ISABEL

 

Excelente amiga como siempre. besos

 

Interesante, a veces los sueños se trasladan a la realidad...

Hoy soñé que fumaba y ni fumo.

jajajaja

Un beso

Eugenio

 

gracias Cristobal, siempre es un honor y un gusto contar con tu visita y tus comentarios
cariños

 

Buenas líneas Vevero...

Te llevan de la mano al paso siguiente.

Gracias por compartirlas. Un abrazo.

 

Interesante, espero la contnuacion..

Un abrazo.

 

Querida amiga que prosa tan impactante con ese sabor a humo, con ese aroma de cigarrillo que impregna la ropa y la habitación...si lo sabre yo!!! que estuve muchos años acompañada de ese aroma que despierta en medio de la noche. Suave, silencioso y con gran imaginación tu intensa prosa. Denota la soledad en su ansiedad de despertar con aroma de ausencia. Estrellas mi amiga...Paloma2

 

Gracias Monica, me encanta recibirte en mis escritos
Besos

 

Excelentes letras Vevero. Pintas muy bien la escena, con gran acierto en la secuencia, sin perder en ningún momento el hilo. Me gusto mucho tu manera de elaborar las frases.

Mis aplausos y estrellas!

 

vaya que bien, en ocasiones los sueños son mejores que la realidad y en otras la realidad es tan buena que se queda ahì como un sueño..

excelente sin duda

 

Gracias Flor por leerme y por tu comentario.
Saludos

 

Disculpa por no haber pasado antes en tu tema, pero estaba en otro planeta :::sorpresa1:::
Me gusto mucho tu narración, no solo por lo bien construida que esta si no por el casi magico final. Invita a fumar...Pero no de esa manera claramente..::jos1:::
Un gusto recorrer tus letras amiga...R. toro.

 

Gracias Isabel por estar siempre presente en mis escritos, es un gusto enorme compartirlos contigo.
Besos

 

Gracias por tu comentario, es verdad me gusta el relato de las cotidianidades,ha sido un placer recibirte en este texto
Saludos

 

Gracias Javi, besos

 

Alucinante que manera tan sútil de describir en prosa dejando leer entre líneas.
Que buena eres tia

 

jajaja no despuntes el vicio por mi culpa, gracias por comentar
beso

 

Un amor de humo, efímero pero sustancial aun entre el sopor del alcohol.

 

Gracias Jorge, es un enorme gusto para mí que te agraden mis escritos
besos y flores

 

Gracias Yolanda, un placer encontrarte aquí, Besos Amiga

 

Gracias Anave por tu paso
Cariños

 

Me diste un rato agradable leyendote, un abrazo fuerte

 

gracias Rosa, me alegra y halaga haber conseguido lo que me proponía.
Besos