Mi cárcel mi libertad

Mi libertad es mi encierro
Mi amada mi verdugo
Mi delito tu existencia
Presidio al alma, encierro a la pasión,
Juez del alma, verdugo real.

Me condeno a tu ausencia,
Busco mi libertad, gano tu sentencia
¡Tú mi cárcel,! mi dolor, tú mi libertad, mi amor
Libertad y dolor ofrezco a mi sentencia
Pasión y eternidad requiero para tu condena
Eres defensor del culpable y juez del inocente
Eres delito y pena, eres juicio e indulto.
Eres cárcel e impunidad, eres flor y espina
Sentencia y absolución.

La libertad condicional a nuestra existencia
Amor, la sentencia, en la eternidad... ​

 

Cuevano amigo olvida tu condena y busca tu libertad pero que no sea tu carcel tu libertad amigo no te sentencies por un amor por el contrario que tu amor sea presa de ti cazador amigo adelante triunfa en el amor lo haras suerte y que gran poema amigo un placer leerte.

 

Cuévano que interesante juego de palabras, mi amigo. Y aunque suenen contradictorias, tan ciertas. Que se puede ser cárcel y libertad al mismo tiempo. Absolución y castigo.
Te mando un gran abrazo.

 

Gracias por tus palabras,
Recibe un abrazo de tu amigo Cuévano.

 

Así es mi querida Azul Profundo, la libertad aun en la prisión esta en tu pensamiento, y esto del amor uno puede llegar a ser prisionero en el alma cuando no es una relación en identidad.

Recibe un abrazo de tu amigo Cuévano.

 

BONITO POEMA! me ha gustado mucho la forma de repsentar el amor!
saludos,
Iva

 

Gracia Iva por dejar tu huella al pasar por estas letras