soneto triste y melancolico

A lo largo de las horas
El recuerdo se acrecenta,
Mi nostalgia me remonta
A aquellas inmensas cosas.

Mi nave se hunde con sus proas
En este mar que ahora me desmonta,
Llevándome a la tristeza que ahora es mi costa,
Dejando mí mente dura como rocas.

Recuerdo incansable su entrañable persona,
Innegable pienso en su sonrisa,
Entristecido quedo con el recuerdo que en mí retoña.

Extraño su dulce cabello que se riza,
Añoro su melódica voz que entona,
Muero por sentir y acariciar su brisa…

 

El deseo al amor, y al ser que se le ama es bueno, buen poema.