Viento

Un temblor de espiga en la nuca.

El nordés danza por las colinas de tu pelo,
se acuesta en el alga de tus rizos,
compone urdimbres de caoba,
enrosca su río de oxígeno azul hasta la raíz oculta
de tu templo.

Deja que el tocado ondule,
no retengas el látigo que fustiga la quietud,
que restalle su furor hasta que la madrugada recoja
la tempestad de un aire bravío
que te desconoce.

* nordés: viento de Galicia.

 

Hermoso, un placer leer. Un abrazo

 

Gracias por tu lectura y comentario. Un saludo cordial.

 

Hoy mientras desayunaba con José María entraba un rico viento que nos alejaba de ese calor de esto días aquí en Madrid, encantado poema estimado Ramón, abrazos con brisa cercana

 

Gracias, Guadalupe, por tu lectura y palabras. Un abrazo y buena suerte con las presentaciones.

 

F elicitaciones. Saludos cordiales.