Quintillas quincalleras quizás quemen quilos

Soy Valbuena de apellido
mas de Valbuena no soy
produzco vino en bocoy
aunque no suelo ir bebido
pues siempre sé con quien voy

 

Yo no sé si vengo o voy
que la vida me confunde
y con frecuencia me infunde
temores de lo que soy
y le dejo que me inunde.

 

Que el sótano se me inunde
se transforma en un ritual.
El desagote pluvial
parece que lo confunde
con su destino fluvial.​

 

Este es un curso fluvial
que riega campos y huertas
tras abrir bien sus compuertas.
Así funciona el canal
que alivia las tierras muertas.

 

Eso de las lenguas muertas
nunca tuvo buena prensa
porque al poder no compensa
abrir, al saber, compuertas
…mejor cerradas que abiertas

 

Es mejor que estén abiertas
las puertas de la cultura
a no ser que sea oscura
y lleve a tierras desiertas
la inútil diplomatura.

 

Pensé que diplomatura
era el don del diplomático.
A veces, me deja estático
el DRAE con la estatura
de su tesoro idiomático.​

 

Este detalle idiomático
no es de un estudio inconcluso
ni es del licenciado al uso,
es el título automático
a un ciclo corto y concluso.

 

Yo concluyo y no concluso
este tema en la quintilla
me tomaré una rosquilla
porque estoy mas bien recluso
del quehacer de mi chiquilla

 

Es tan solo una chiquilla,
que no llega a los cuarenta.
Cada día se presenta
con dolor en la rodilla
y su madre se lo ahuyenta.

 

Lo que a tu suegra le ahuyenta
es que te vayas con otra
o que a ella le hagas la contra
o que le llames sargenta
…más, si se va, ¡vaya potra!

 

Caer por el terraplén
resulta magia o tragedia,
pasa por simple comedia
con el vértigo del tren.
¡Pero, ay, si la muerte asedia! ​

 

Sabe todo Wikipedia.
Me dejo de vuelta y media
el otro día al saber
que no hay comedia o tragedia
que no sepa esclarecer.​

 

No lo pudo esclarecer
la enciclopedia sin fin,
nos ilustra en el confín
-es cosa de no creer-
del lamento del violín.​

 

Me pide que le avitualle
cuando sé que es un engaño
y me llamará tacaño.
Yo le pido que se calle
y su móvil dure un año.

 

Resiste la teleserie
veinte años en antena
y sin cambiar de cadena;
ni una noche a la intemperie
nos acompaña en la cena.

 

Hoy tengo para la cena
mi comida favorita
un huevo frito que grita:
!Cómeme , no te de pena,
pues ver tus ganas, me excita!

 

El pobre gato se excita
tanto con hierba gatera
que parece coctelera
jugando con la ratita
vistosa y cascabelera.​

 

¡Vaya con cascabelera!
Si me saca de la acera
ocupando todo el paso,
encima no me hace caso
y se aleja a la carrera.

 

“Esto no es una carrera”.
dice el hombre con su coja
mujer, y no se enoja
si lo apuran en la acera.
Y ella, jovial, se sonroja.​

 

Cuando me ve se sonroja
no se si es porque me quiere
o porque su hambre requiere
que le invite a una milhoja
para mojar con aloja

 

Cerca del jardín se aloja
una alondra cantarina.
Antes se llamaba “alhoja”,
en tiempos de la gomina.
Mas demos vuelta la hoja.​

 

Yo le doy cuando se enoja
pan de dulce con cafés
mejor le digo que escoja
rebanada de mil hojas
o tal vez un pan francés.



​

 

Yo tengo un yerno francés
que le gustan las guindillas
las paellas, las morcillas
y el rabo a lo cordobés
…todo cosas muy sencillas

 

Si las hacemos sencillas
para que todos entiendan,
con nuestras simples quintillas
conseguiremos que atiendan
y se peguen a las sillas.

 

El jueguito de las sillas
me saca de las casillas.
Los gordos me dan culazos
y termino hecho pedazos,
los huesos hechos astillas.​