Quintillas quincalleras quizás quemen quilos

Estaré por un rato
es un placer decirte buenas noches
acariciando al gato
temo que te trasnoches
escuchas con paciencia mis reproches

 

Cincuenta años de reproches,
padre, me tratas de idiota,
cuando leas esta nota
me habré ido con la Choches
aunque sea una drogota.

​

 

Tengo en casa una drogota
y voy a decir que es gata
aunque la rima rebota
y no resulta muy grata
con su asonancia remota.

 

Qué impresionante pelota
le puso Messi a Julián.
Y no entendieron ni jota,
ni jamás entenderán,
lo que hizo mi compatriota.​

Bueno... entender, lo entendemos todos. Pero hay que rimar. Recordaba uno de los goles a Croacia. Hay que seguir celebrando por otros tres años. El que viene (anoten esta) lo gana Brasil.

 

Se te ha filtrado una lira, amigo Pi. Igual el tren no se detuvo.

 

Esta vez mal le rebota
en el poste el balón de su contrato,
le sale esa pelota
hacia otro sultanato
que paga vacaciones sin recato.

 

No tuvo ningún recato
un marido mentecato
al mirar a la otra dama
y allí comenzó el relato
y solo se fué a la cama

 

El tipo te ata a la cama,
aunque esté con otra, o no
-como nadie lo contó-,
está muy solo en su trama,
nunca... nunca... a nadie amó.

 

Terminó Bernardo en cama
su quintilla más reciente
y José Luis con la rama
empezó la suya ausente
y apagándonos la llama.

 

No sé si seguir amó
o seguir con lo de llama
a mi me gusta más cama
después de un buen tournedó
y así acabo con mi dama

 

Inspirado con mi dama
la quintilla tergiverso
al confundirme de verso
ella se volteó en la cama
y me mostró su reverso


(Eso fue lo que pasó)

 

Gracias estimado Cyrano, me confundí de enlace. Está corregido pero sigan como prefieran. Saludos.

 

Con la palabra reverso
tengo en la mente metido...
"eso es verso repetido
o algún poeta perverso
que de un bucle no ha salido".

​

 

Siempre al “Barbudo” le pido
que sea fiel mi mujer.
O que nunca lo haya oído.
Y si oí, no haber sufrido
por no importarme el ayer.​

 

Un buen día tuve ayer
por fin se fueron mis nietos
y con todos los respetos
volví a tener el poder
de escribir varios sonetos.

 

Son divinos los sonetos
largos, y a la vez escuetos.
¡Quién pudiera ser Quevedo!
Si lo mío es un enredo,
un perderme en los tercetos.

 

Es lo peor, los terceros
porque lo anterior va andando
y tú sigues cavilando
no acabar con dos panfletos
…así, que a seguir pensando.

 

Seriamente estoy pensando
en viajar hasta la luna
emplearé mi fortuna
no continuaré esperando
por la ocasión oportuna

 

Yo considero oportuna
la ocasión para gritar
aquí, desde la tribuna.
¡Cómo nos van a anotar
lejos de la medialuna!
​

Para el que no es futbolero, eso significa que nos clavaron un golazo desde lejos.

​

 

Cuando vieron media luna
uno dijo “va creciendo”
el otro que “decreciendo”
sin consenso hasta la una
¡Vamos, borrachos, saliendo..!

 

Borrachos, iban saliendo
del bar dando tropezones
con todos los peatones
mientras seguían bebiendo
sangría de unos porrones.*

​

* Porrón: El porrón es un recipiente de cristal o cerámica de capacidad variable, cuyo detalle más representativo es su forma: una botella abombada en la base o de vientre abultado, con un largo pitorro acabado ...

​

 

¡Si habré tomado porrones
de cerveza en los veranos!
Y mujeres y varones,
no-binarios, locos, sanos…
los tomaban a montones.​

 

De versos junto montones
y los pego en las paredes
y ya los pobres ratones
se pierden en los renglones.
Andan cambiando sus sedes.​

 

Los bares ya son tus sedes
para morirte en enredos.
Será mejor que te quedes
sobreviviendo tus miedos
solo, si soltero puedes.​

 

Si vivir solo no puedes
búscate un buen compañero
o una buena mujer, pero,
amigo, nunca te hospedes
con quien no sea sincero.

​

 

¡Vaya palabra!, sincero,
casí ná que diría Juan
prototipo del truán,
ya no es sincero ni el clero
ni el señor ni su edecán.

 

Me resulta el edecán
una figura curiosa,
una ayuda milagrosa
que cumple con gran afán
si le pides cualquier cosa.

 

¿Cómo rimaré con “cosa”?
Es poca cosa y es todo.
Es rimar con “Cuasimodo”
en tertulia culturosa.
Es como hundirse en el lodo.​

 

¡Ese es el sitio!, en el lodo
donde debería estar
y su trasero sentar
por creerse que lo es todo
siendo un tipo tan vulgar

 

A veces luzco vulgar
soy consciente de ese modo
que en coloquio suelo hablar
no me logro refrenar
tengo hambre y me incomodo