Quintillas quincalleras quizás quemen quilos

No sigas, anda, no enredes
que el asunto no te incumbe
y, aunque parezca que cedes,
no vaya a ser que te tumbe
y desprestigiado quedes.

 

Siempre te comes los quedes
porque suelen estar buenos
y aunque cada vez son menos
cosas peores “veredes “,
amigo Sancho ,en duodenos.

 

Si pensara en el duodeno,
el íleon y el yeyuno,
se me corta el desayuno.
Prefiero ponerle freno
al meollo inoportuno.​

 

Existe en este portal
víctimas y victimarios,
prudentes y estrafalarios,
lo sacro y lo terrenal
y hasta un revolucionario.​

 

Acto revolucionario
serían anti-quintillas.
Escribir sobre el osario
de muertos en las guerrillas.
Llorarlos en escenario.​

 

Otra guerra que hay candente
es la de Ucrania, señores
que sigue allí, eternamente
y donde no tiran flores
…es una guerra indecente.

 

Lo de ser improcedente
a nuestros años no manda
ni en Madrid ni en Samarkanda
no hay que ser tan inocente
como lo es toda esta panda

 

Perdón respondí a la otra página. Ahora guervo.

 

Maroc te has ido de página

 

Sí, me pire por ahí.

En un zoo estaba el panda
comiendo mucho bambú
y unos chicos de parranda
se zamparon un menú
en la arrocería Abanda.

 

Yo nunca visito Abanda,
Alabama no me gusta.
El sur un poco me asusta,
la triple K siempre anda
obrando de forma injusta.​

 

Me trata de forma injusta
pues no me conoce bien.
Es dura, firme y adusta
y me habla con tal desdén
que en sus palabras asusta.

 

Su enojo a mí no me asusta
aunque me frunza la boca
pues se bien que a él no le gusta
que oiga música barroca
porque dice que es vetusta.​

 

¡Vuelve la putrefacción
de intrigas a esta oficina!
Aquí verás una mina
al borde de la explosión
a la vuelta de la esquina.​

 

A peregrinar iría
pero no tengo calzado
porque al haberlos gastado
buscando sabiduría
hasta el seso está ampollado.​

 

Pepe lleva buen calzado
con colores muy hermosos
pero ha sido secuestrado
por unos tipos mafiosos
que le tienen encerrado.

 

Debía estar encerrado
por tanta malversación
y por tan mala gestión
debían haberlo echado
antes de entrar en prisión.

 

Algo harás en la prisión
si crees a pies juntillas
que con cinco versos brillas;
es vencer tu desazón
escribiéndonos quintillas.​

 

Bueno no te pases que tampoco hay que ir a la cárcel por escribir quintillas
(broma).

 

Son a veces las quintillas
las armas de doble filo
que aunque no las haga Esquilo
resultan ser maravillas
si se escriben con estilo

 

Un automóvil de estilo
refinado me compré.
Con todo lo que gasté
me quedo muy intranquilo.
Ya no sé qué comeré.​

 

Mis palabras comeré
dijo en voz baja Jacinto
suave, suave, en plan sucinto
y tranquilo votaré
lo que diga Recesvinto

 

Se llamaba Recesvinto
un amigo de Susana
y bebía vino tinto
casi toda la mañana
con su primo Chindasvinto.

Esto va de visigodos.

 

Tuvimos a Chindasvinto
como rey de las Españas.
No destacan sus hazañas
ni tampoco fue su instinto
propio de las alimañas.