Hasta cuándo las plegarias nublarán mis otoños y los torrentes desesperados en mi hoguera? Hasta cuándo mi alma de invierno se tornará en primavera y podrá cantar en notas alegres que se oigan hasta que florescan los frutos del espíritu? Hasta cuándo mis sueños dejarán de soñar mientras se muere mi fe y que mi espalda dura se vuelva hoja leve y mis congojas se rompan en carjadas?
En la lluvia ocurrente rememoro, fugaz, el espejo brillante me trasluce su faz, resaltaba el fulgor y su poca nobleza… (Eran tiempos preciosos de otoñal juventud no como hoy: los momentos de muy poca virtud) y crecía, hasta el cielo, su soberbia belleza. Caminaba tan pícara por el viejo sendero con un paso silente, poco extraño y viajero; el piropo se oía como música hermosa; parecía azucena entre puertas de invierno, parecía una perla, parecía un infierno el quererla por siempre con la daga afanosa. Todos iban tras ella, le ofrecían regalos; la miraban los pícaros, los humildes, los malos, o un trivial como yo. Parecía un tesoro… su perfume sahumaba como flor del herbario; nos miraba tan idos, parecía un acuario su retina y fulgor como perla o el oro. Pretendientes rondaban su carmín corazón; y tocar sus impulsos, y quebrar la razón; por capricho de estío, por un ruego de invierno; era musa a mis ojos, le rogaba amistad… ¡Qué belleza que tuvo, qué valor de la edad! ¡Qué mujer para bella en mis tiempos de infierno! Siguiendo las normas de Rubén Darío, la sonatina consiste en sextetos alejandrinos y tildaciones obligatorias en sílabas 3 y 6 en cada hemistiquio, también se pueden tildar 1-3-6, y la clave de rima AABCCB.... Espero que les guste:
los antiguos amigos ya saben qué es, para los nuevos es una herramienta que le va a servir, mis deseos altruistas me llevan a esto:
No deseo cortar mi cabellera larga, cubre la oreja, frente y cara; no me imagino si es que lo cortara… no, no, no,… soy arisco de tijera. Cuando era blonda, parecía estera. ¿Y si azabache o negro lo pintara? Mi cabellera es algo rara y clara al recortarlo, un lazo le rompiera. Pienso en mi cabellera ya no blonda, pero ya negro en su color oscuro lo cuido y dejo suelto sus raíces. Una tijera de envidiosa ronda, entre cortar y no, pues hay un muro que opaca mis cabellos y matices.
Constituido de 700 poemas: 400 sonetos, 140 poesías clásicas escritas en el 2017 - 2018 100 poesías clásicas escritas en el 2015 - 2016 25 poemas surrealistas 35 poemas en verso libres, algunos son prosas poéticas.
Trajeron al nuevo can era un peluche marrón, era un chocolate, y son huellas que no volverán. Todo el cariño le dan, la bañera al chapuzón, muerde gatos sin razón lo pasean con afán. Con años fue diferente el cánido de repente cambió, quererlo fue incierto. Una tarde, dormitando enfermó, el dueño llorando. ¡Ay!... ¡¡Su can había muerto!!
Ella sonreirá y jamás me pensará, la he perdido, sentiré el tren embestido, muerto moriré aquí a más. En mí sufrió, fui incapaz de donarle mi latido, él quien cura su quejido ¡solo aplaudo al tipo audaz! La conocí… fue semilla, ya hoy es pura manzanilla, va el impuesto al arancel. Hoy que soy un cruel cobarde, la amo, la adoro y es tarde, yo... ¡solo le aplaudo a él!
¿Cómo tocar tu osado labio "maligno ají"? que obstruye al corazón de rojizo pimiento, áspid fluido de boca al envenenamiento: el dedo en la cruel llaga habita y pica en ti. El prohibido y errante beso que no te di el pavor que he sentido, nos parece un convento tu altar de primavera, de sueño y juramento, engañoso disfraz...tú, linda ¡¡ven a mi!! Brazos punzocortantes, tu boca tentación, la mancilla, desdicha, la fútil maldición, vanagloriosa vida al no poder amarte. Si no te doy un beso, yo seré ya un occiso, que divaga una llama prendida en compromiso tal vez he de morir… Linda ¡¡voy a besarte!!
Inerte lágrima, banal espiga, figura ovoide, agua azul dibujo, fino diamante claro de buen lujo, gota salada que el retiro irriga. Desconsuelo errabundo, nos persiga, como riachuelo torrencial de flujo de la inquina y modesto, el cual redujo discrepancia y borrico que me hostiga... Es líquido salado y agua en rima: un verso tonto y borra el desencanto, se vaya y llore eso me lastima. Lacerante verdad que reanima aquel charco de lodo forma un manto donde tal lágrima al fin se encamina.
Deuda en santa semana, critican las raíces de mis versos, ese infierno de cuerpos que son tersos, obsequiando su amor la cortesana... La maldad soberana entre los más perversos es por honra de adversos!; Dios quien ve amor; no mira una mundana. Es la corazonada de novicia, amor y celibato en el confín, ¡pobre!... es una mujer, y ¡qué injusticia…! La señal de caricia, y se calla un amante parlanchín; ellos son presos del amor, malicia.
Le encaro al viento, zángano tornado por esa vida, tóxica manzana, y le interrogo hurgado a la mañana, a mi jardín, las rosas de mi prado. Yo le saludo al astro nacarado, a mi dormir sonámbulo que arana, despierto en montes fríos de nevada, yo le saludo siempre y asustado... ser atraído; ruin, rasposo anzuelo, y ya agoniza, flor color de otoño; en el riachuelo quiero meditar... Solo pregunto al aire y doy al vuelo, ya viejo yo me vuelvo tan retoño, siempre yo, sueño amargo el desdeñar.
Se compone de tres capítulos: 1 - SONIDOS : 400 sonetos 2 - CANTOS: 100 poemas clásicos tales como coplas, ovillejos, romances, liras, décimas, etc 3 - TRINOS: 80 poemas en forma libre, homenajes (20) y otros de todos. Estará listo en diciembre o Enero...
Tu alma es como un océano en lo azul, ¡nana!... ¿dónde estarás en este día? Puede que navegando en cofradía en las mareas bravas y gandul. El ataúd te condenó esbozando; son años, no se van nunca a iterar, todos se quiebran solo a sollozar. En nuevo cielo estás ya descansando... No estás y nos recorre este coraje: cínico, vil, burlón, malo y malaje. Abuela, tú te alejas… tienes prisa. Yo me niego a pensar que estás occisa, ¡Oh nana, cielo, dicha y esperanza! Descansa abuela al fin ¡¡ternura mansa!!
Su rostro era la pálida, la luna, la noche de un silencio de llovizna era un desdén, bellísima en sí misma, el ritmo juvenil ya no es fortuna... Siempre fiel al amor que le tortura, que enamoraban a primera vista la ilusión que se va y triste se alista... ¡Ella fue tanto amor, tanta locura! Pues aquella mujer ya no es bonita, tiene el rostro que nadie le cautiva. No está dentro de mí, ni en ningún lado. Se acabó y los caminos son distintos. y siempre hay el rescoldo en los instintos aunque aquel bello amor haya terminado.