116.

Las palabras que apenas salen bailando,
se chocan con todas mis vidas,
revuelven las cenizas de la rebeldía
pero sólo hallan caramelos de miel.

La música de todos los siglos grita,
hurta los privilegios de lo que fabrica mis sueños,
derrite la vergüenza y el rencor
como un viento que nunca ha errado el camino.

La luz de la conciencia le habla al amor,
quiere corregir las exactitudes humanas,
porque son certezas las que sobran
en este recorrido mortalmente obligatorio.

El mar tiene dos ojos bien grandes,
para otorgarle a los secuaces del tiempo
el secreto de nadar en los ritos de la carne
sin tener que caminar primero por la tabla.

 

Excelente, una obra de arte, sublime.

 

gracias Jorge!!!!!!!!!! besos!!!
Diana

 

Somos repetición de lo ya vivido, viendo historias que ya son historias, un eco con diversos orígenes. Anclados en este mundo rodeados de realidades alternas, a las cuales tu eximia poetisa seguramente tienes acceso.
Un abrazo.

 

me encanta naufragar en distintas dimensiones... me descubriste!!!
abrazo!!! Diana

 

Mi amigo Redivivus habla de visiones alternas es decir de la posibilidad de echarle un vistazo a realidades paralelas, a otros espacios, al multiverso.
Al leer tu poema tengo la impresión que tui tienes esa posibilidad creadora y creativa. Felicidades!!!

 

qué lindas palabras, Banderita!!
gracias y abrazo gigante!!!!
nos estamos leyendo en esta o en cualquier otra dimensión...
Diana