Noches reunidas

Por la noche...
sobre cómodos taburetes
de pino y esparto trenzado.
Ambos mecidos
por la nocturnidad;
es cuando somos
solución a las preguntas.
En esa mansitud
bañada por la luna:
en el balcón.
Resucitamos en la compañia,
en el paladear los aromas,
de rosales desperdigados,
en esta cita esplícita y desenvuelta;
sin horarios.


En labor
(tu mano acaricia a la mia).
Un honor
con magníficas alegorías,
un puro sabor a leyes,
basado en la fecunda,
la más digna
de las filantropías.


Tu me cuentas,
yo, embelesado te escucho;
y en este escuchar aprendo
a navegar por valses lentos
(no soy un iluso),
a aterrizar en tus labios, con besos
(permitiéndome ser un intruso).
Nos proveemos de una tierra hecha de cielos,
mediando para ello,
manifestaciones de lunáticos influjos.


Por la noche...
degustamos té de menta
(con limón y entre los hielos),
reposado sobre la redonda mesilla
(barnizada después de su forja),
rememoro mis anhelos
y tu desatas tus deseos.
Desprenden nuestros pensamientos
ideas y lindos sueños.


Tu silueta esta posando, posada
en el contraluz,
sobre ilusiones que son baranda,
que son refugio,
que son alivio y consuelo.


Colgada, le recitas sobre mis rodillas,
conmigo y la luna como amigas,
a esta noche, la cual ama y es amada.


Por nosotros....
la noche se alumbra de luz,
la luz somos y cabe en nosotros.
Al juntarnos y teniéndonos,
el polvo se convierte en hierba,
la hierba recibe la luz
y el entendimiento deja de ser,
polvo de deseo o antojo,
nos visita viajando en la forma,
de una fugaz y lumínica estrella.


318-omu G.S.

 

Gracias por la fuerza del poema y por el ratito en el cual, la rabia y la melancolía, desaparecen, para poder seguir de cerca, el cariño de tus letras....

 

Sobran laspalabras y el comentario
Alegoría de una noche en perfecta comunión

 

Gracias a ti amigo por creer como valioso el contenido de mis letras.
La verdad es que nos cuesta de prestarle atención a tantos y tantos momentos que transcurren a nuestro verita en las formas contenedoras de lo más placentero; suelen ser instantes tan sensitivos como sencillos (sin grandilocuencias).
Parece estemos inmersos en una irremediable voragine de sucesos que nos hace olvidarnos de ellos y deambular medio ciegos.
un abrazo hondo y sincero Francisco.

 

En ocasiones una mirada basta para comunicar ampliamente erizando la piel de quien escucha atendiendo a ese tiempo de caricias.
mi saludo te llegue Armonía.

 

Preciosos tus versos, qué bueno debe ser que un hombre te escuche plácidamente (no todos son capaces).
Saludos cordiales argentinos

 

El ser escuchado conlleva el calor de la atención y el valor de la persona; que tarde se suele aprender a escuchar, cuando en el mejor de los casos se aprende (no siempre es así).
Perdona Fabiana por la tardanza en contestar a tu comentario.
un abrazo te llegue allá donde estés.