para qué

para qué te sigo escribiendo
poemas de amor cuando hace tiempo
que dejé de quererte, cuando casi
me olvidé ya de ti y es rara la vez
que pienso en ti y se me vuelve a poner
el corazón triste para qué revuelvo
el cieno oscuro donde van quedando
cada vez más hundidos los restos
del amor que te tuve y esa parte
de mi vida que fue tuya esa grieta
que se abrió en lo profundo de
mi alma ese tajo que
me dejó para siempre partido en
dos pedazos para qué te sigo
escribiendo poemas de amor para qué si
ya no te quiero me das lo mismo ya te olvidé
para qué si con una mitad puedo ser
casi el mismo que era antes
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Pues tiene razón, esto del amor harta y cansa, escriba un relato breve, seguro que le satisface más que este amor que nos destruye siempre a los hombres, por mucho que digan las mujeres, que son más lloronas. Buenos versos de desamor, señor Villa. Se le saluda.

 

Será que queda un poso, aunque solo sea el recuerdo de un sentimiento.
Un placer pasar
Abrazos.

 

Villa no se puede responder a algo que ni tu mismo sabes, pero siempre queda alguna huella, quizás algo fue bonito.
Hoy con un riñón también se vive, e importa que en verdad así sea y no te importe.
Nosotros hemos ganado un buen poema.
Bendiciones. Pili

 

Bravooooooo Sr. Villa, le quedó precioso. Dicen por ahí que donde hubo fuego cenizas quedan, yo creo que para un amor que se vivió no hay olvido y asi lo demuestra su versar meláncolico y nostálgico. Saludos. Dios le bendice

 

Hay que seguir escribiendo villa, hasta ahora no he visto mejor medicina que el amor, este me gustó, un saludo

 

El ser humano es animal de costumbres... y el poeta también.


Musas son musas, su valor como poema es enorme,
en la vida posiblemente ni existan... no sé... ¿existe aurora? jajaja

Besos