Princesita durmiente

Ni se secaron los mares ni cayeron meteoritos,
los dos seguimos aquí, amándonos bonito,
quince "te quiero" después, parece que fue ayer
cuando me hablaste al oído, a veinte metros de mí.

No hubieron granizos, aunque hubo aguaceros,
ningún militar tiene rango superior a un beso en tu cuello,
se acerca a cero el termómetro cuando siento que te vas,
esta costumbre terrible de buscarte en todo, no va a cambiar.

Soy náufrago, soy enfermo mental si no estás,
soy lunático, soy un cero a la izquierda si no te puedo besar.

En tributo a tu belleza he fundado un ministerio de amor
con la naturaleza y la música que suena en mi interior…

Que estallen los juegos artificiales
y que se ilumine el cielo con tus ojos celestiales.

Guardemos los saludos para otra ocasión
y bésame en los labios,
princesita durmiente que hoy sueño con vos.

Imagina que imagino, imagina si te pienso,
he cruzado el desierto en carritos de sal,
ni se secaron los mares ni ha caído el maná del cielo,
ayer mismo he encontrado un empleo en tu saliva y te vas…

Soy suicida, soy un reo viviendo en prisión,
soy un fantasma que en vida clama tu corazón.

Guardemos los saludos para luego de irnos a dormir
y deja que ande tu cuerpo
que esta noche te quiero para mí.

 

Exuberantes versos, llenos de profundidad y color.
Un placer saludarlo, compañero.

 

Muchas gracias por tu linda visita. Saludos. Un placer recibirte por acá.