Querido amor...

Tengo una astilla clavada en alguna parte

Tengo una cuerda roja atada en mi muñeca

Y una flecha atravesando mi corazón.


Tal vez, han caído el sol y la luna a la vez

Y cada amanecer resulta sorprendente,

Con las plumas de colores por todas partes

Decorando el aire de mi ventana sin cristal.


Correré en busca de una realidad

Esa que dicen que negare a los cielos

Me pondré sombreros nuevos

Y hare el amor con los versos.


Porque cogeré mi propia flecha,

Y la romperé.

Desatare los nudos,

De mi muñeca y romperé el hilo.

Rasgare mi piel,

Hasta encontrar lo perdido.

Y matare a cada bicho volador.


Si tus ojos con los míos son puros

Entonces mira a otra y cuéntale lo mismo.



Busco un ser que dice ser Cupido

Busco un sentimiento llamado amor.


Porque cuando caí en sus redes,

Era el deseo de otra persona

Así que si me quieres,

En los infiernos proclama mi nombre


Los buscamos,

Lo ansiamos,

Lo atrapamos,

Lo conservamos,

Lo obsesionamos,

Lo rompemos,

Lo desgastamos,

Lo matamos,

Lo cuidamos,

Lo perdemos,

Lo hallamos pronto,

Lo descubrimos tarde,

Los imposibles y los posibles,

Los secretos y lo libres,

Los platónicos y los duraderos,

Y esos que llaman incondicionales.


Querido amor, no vengas conmigo.
Soy un desastre cuando estoy a tú lado.

 

Versos bañados en pena. tristeza y dolor por una historia que se desdibujo y quedó en la bruma del pasado. Un cordial saludo deseándote siempre lo mejor para tu existencia. Hasta pronto.