Sueñitos

El tímido bostezo del bebe
que cocimos con saliva
se llevó una mitad de mi cara
la cual no sabía su existencia

Ahora quedé solo,
sin bebe ni saliva
ni fuego ni nariz
ni labios ni corazón

Cuántos cuerpos eternos
destrozaste
jugando a soñar despierto
en vano
miradas de gato en abstinencia
esbozaste,
para entonces era ya un fondo
sin plato

Quizás te encuentre aquí
si sabes desglosar mis versos
y ser como el viento sin ganas
llevándose mi alma en cubos

De alguna manera lograrías entender
de una forma bastante sencilla
que hogar en mis sueños no podrás tener
no te dejaría vivir una pesadilla

 

Maravilla excelente de preciosos versos.