Afán

Afán

He perseguido con denodado afán
cual aguas escorrentías
que la lluvia indetenible y fría
no las puede ya juntar,
He perseguido en oscuras noches
las lejanas e inquietas sombras
que dejaron los ocasos,
cuando dormido entre tus brazos
enredado en tus sedosos rasos,
en los sueños compartidos
de encendidas amapolas,
que con sus flores rojas
en tiempo de marcera,
pinta de encarnado los trigales
semejando ser nidales
donde en fogosas noches ardieran,
cual tizones encendidos
nuestros cuerpos que fundidos
piel con piel se nos alteran.

Recorrí río tras río
entre meandros y caudales
en orillas y bajios
en pozos y manantiales
padeciendo de los males
de la soledad y la ausencia
que cual fríos invernales
me han dejado tu inclemencia.

Surqué en gran navío,
gota a gota siete mares
dejando el lastre y los pesares
en los bordes del estío
y sin hallar avío,
el naufragio fue mi sino
como marcado destino,
no tenerte en mis redores
y con desprecio me ignores
siendo largo tu camino
y cercanos mis rigores.

 

Gracias Nancy, por tus siempre gentiles palabras.
Un abrazo.

 

Agradecido Fénix, por tus generosas palabras y deferencia que no creo merecer.
Un abrazo.

 

Gracias, Ana M. por tus siempre gentiles y analíticas palabras.
Un abrazo.