Inocente soledad

Le explicare al mundo entero
que ella hoy me ha hablado.
La encontré aquí a mi lado,
caminando en mi camino,
esperando esta vez
quizá hacer algún amigo.

Como siempre abatida,
con cara de desolada.
Me contaba que otra vez
le han dado vuelta la cara,
diciéndole que no es
mas que la soledad tan odiada.

Mas yo en sus rasgo vi amor
pero también vi mi alma,
dándome cuenta que soy
su fiel reflejo en el alba,
cuando todo está tranquilo
con sentimiento de calma.

A veces creemos que,
por estar con mucha gente ,
ella se aparta sin dar
su sentimiento frecuente,
pero en verdad ella está
por mas que no se la siente.

Pues yo hoy le doy las gracias,
aunque no se si la acepte.
Tal vez mejor por acá
hoy se los marco imponente
para enseñarles que acompañar
es lo único que pretende.

Ella siempre es bienvenida
en la vida de quien entiende
que no quiere molestar,
sino dejarnos conscientes
de que su nombre no es Mal
si no Soledad inocente.

 

Soledad, soledad, mi fiel compañera
que nunca me abandona. Un abrazo, me ha encantado tu hermoso poema.