Inspiración; ¡Déjame!

Noble, noblísima,
¡déjame!
tu libidinosa presencia me seduce en la noche,
asiduo enemigo;
no soy nadie, vete y desoye
¿O acaso eres mi castigo?

Muralla en donde se refugian
los poetas guerreros sin talento
¡dame aliento!
y déjame respirar
¡suelta mi mano te lo digo!
eres insolente urgando mi alma
¡me deprimes! (¿o me alegras?)
...Quiero calma...

Eres como una madre, me abrázas
me relájas, tómas mi mano
con tu mano de átomos invisibles
e invencibles,
la deslízas sobre la hoja blanca
hoja virgen,
mientras acaricias mi cuello
éres profana y éres santa,
mesmerizado sucúmbo
¡déjame decidir!
¡Yo busco mi rumbo!
(¿yo busco mi rumbo?)
eres hermosísima

noble, noblísima,
¡déjame!
tu libidinosa presencia me seduce en la noche,
asiduo enemigo;
no soy nadie, vete y desoye
¿O acaso eres mi castigo?

¿¡Por que la melancolía!?
no la quiero, ¡desespero!
me sensibilizas
me abres la vista a mil dimensiones
¿que quieres lograr?
¡Son las 3 de la mañana!
mira mi piel despellejada
de prejuicios,
estirada en el suelo.
Bueno, en realidad, gracias por eso...
esta relación insana
recorre irritada las trincheras de mis sesos,
ya lo has hecho, los has logrado,
tu poesía has completado,
y yo, desecho...

¿Ya has soltado mi mano?;
¡siento menos peso!
gracias también por eso,
me iré a dormir...

 

ves? le vas dando fuerza a las historias y me gustan mäs...eso de las trincheras de los sesos ...muy bueno...la puta inspiración, raya la paranoia...yo siempre tengo una libreta encima de la mesita de noche,aparte de otras cosas...un abrazo pibe...

 

Gracias....sin humildad no se puede aprender nada..... Eso lo aprendí de vos...
cuidate. Y gracias por el comentario.