Marrón

Camino por un sendero oscuro, muy oscuro, tanto que la única luz que puedo ver es el odio; El color del odio es gris que es el exacto termino entre el negro y blanco.
El color del amor es blanco, el del desamor es negro; si por algún tipo de desgracia haces la transición de blanco a negro quedas convertido en un gris tenue que al pasar del las horas se torna mas negro.
Creo que mi verdadero color es marrón; el color del dolor es rojo, el de la decepción amarillo, juntos combinados son naranja; el naranja es producto del rojo o sea dolor intenso y amarillo intenso, como consecuencia de todo el gris conjugado con el naranja produce el marrón del que estoy hecho. Marrón, es lo que me define; originalmente yo era blanco, lo malo es que llegué a ser tan blanco que mi propio brillo deslumbrante me cegó y no pude ver el negro cuya llegada era inminente.
Extraño mucho el blanco, pero no tan blanco como para estar ciego, pensándolo bien ya no estoy seguro desde hace cuanto tiempo el negro estuvo presente sin darme cuenta, la verdad, es como una quimera.
La única forma posible de volver a mi estado original sería que ese marrón en que me he convertido sea saturado constantemente de blanco, pero no cualquier blanco, tiene que venir de la misma fuente que me lleno de desamor, y de pronto por el milagro del color del amor yo pueda ser el de siempre.