Metamorfosis

Poco a poco me voy convirtiendo en nadie.

Una sombra corpórea que se diluye en los cristales,
lengua muda incapaz de comunicar el miedo,
pasos sin dirección por jardines de infancia,
voz en que la voz solo le habla al propio corazón.

Hay una libertad en el desprecio donde se alza la risa,
llora el anciano al desdeñar su vejez,
la indiferencia es un aguijón en la penumbra de los días.

Descubro las cortinas y la luz entiende
que sigo aquí
como un rosal que solo necesita
el cuidado amoroso de la claridad.

 

Sentirse vivos, vivir cada momento conscientes de que es nuestro, que nuestra esencia impera en él, somos acto y consecuencia y podemos cambiarlo todo y ese es nuestro deseo amigo Penabad, pero el bello y profundo lirismo de tus versos nos presta su luz para ayudarnos a reflexionar y yo me voy encantada con la profundidad que encierra este precioso poema. Encantada de leerte, querido amigo, muchos besos con cariño y admiración....muáááááacksss...

 

Gracias por acercarte a este poema y dejar tu amable comentario. Un abrazo.

 

Querido amigo, muchos estarán de acuerdo con estos últimos versos que destacó. Llega un punto digamos de inflexión en la vida, donde haces una pausa y ves con quién realmente cuentas, o en los momentos de dificultad que sientes que te dejan solo, pero son los momentos donde personas deben irse de tu lado y llegar las que convienen o llevar una vida en el alumbramiento de lo sencillo. Abrazos, querido amigo.

 

"la indiferencia es un aguijón en la penumbra de los días"
esel dolor de la desafección en medio de la rutina.
Un saludo afectuoso.

 

Hacerse nadie, caramba, qué noción tan tremenda desarrollas con imágenes de soledad y decadencia, pero exaltado la dignidad de aún ser persona. Muchas gracias, amigo Ramón, por compartir. Te dejo mis cordiales abrazos.