Nuestras respuestas

Espacios soñados,

vislumbramientos que ciegan,

porque nada es más real
que el cuestionamiento,

creemos en que nada es autosuficiente,

todo pende de circunstancias diferentes,

los hilos del destino
juegan con nuestras acciones,

¿quién sabe si nuestros pasos son libres?

las conductas del cielo
son claro ejemplo
de que el caos es ley última,
y la voluntad ley primera,

la esencia del alma
es la mente que la piensa,

los cimientos del tiempo
son pensamientos atemporales,

porque si el tiempo no se cuenta,
el tiempo deja de existir,

y así con toda existencia,
y así con toda creencia blindada,

fluyen los pensares
entre pesares de cuerpo y sangre,

la virtud del conocernos,
radica
en hacernos las preguntas correctas,

la sabiduría primordial,
encuentra, con un esfuerzo justo,
nuestras más escondidas respuestas,

nuestra verdadera razón de ser.