Por caridad.

Ya me evado, quisiera irme a otro espacio,
otro tiempo, tal vez otro lugar.
Tal vez pudiera ser otra persona
tal vez pudiera estar en otra edad.

Quisiera un cambio, me urge renovarme
quitarme de mi interno esta agonía.
Otro mundo, tal vez, otro planeta,
donde la vida tenga otro mirar.

Pero creo que soy la descompuesta
la que ve tras cristales deformantes
la que vive su propia realidad.

Encerrada en mí misma sin remedio
de esta cárcel quisiera liberarme,
estar fuera de mí, por caridad.​

 

Por lo pronto sal a estirar las piernas. Un beso, Luciana.

 

Buen consejo, por lo menos tener salud y cambiar de aires. Gracias por leer y comentar, Sergio. Un beso. Luciana.

 

Rosemery, querida amiga, muchas gracias por leer y hacer esos comentarios tan amables. Un abrazo. Luciana.

 

¿Quién pudiera tomarse un descanso de une misme cuando estamos cercados de lo que somos, de lo que hemos vivido? Muy universal tu sentir, muy certera la forma en que lo enuncias. Muchas gracias por compartir.

Dejo una palabras del poema inmortal de Gorostiza porque son necesarias cuando se busca espejo que no mienta.

Lleno de mí, sitiado en mi epidermis
por un dios inasible que me ahoga,
mentido acaso
por su radiante atmósfera de luces
que oculta mi conciencia derramada,
mis alas rotas en esquirlas de aire,
mi torpe andar a tientas por el lodo;
lleno de mí -ahíto- me descubro
en la imagen atónita del agua,
que tan sólo es un tumbo inmarcesible,
un desplome de ángeles caídos
a la delicia intacta de su peso,
que nada tiene
sino la cara en blanco
hundida a medias, ya, como una risa agónica,
en las tenues holandas de la nube
y en los funestos cánticos del mar
-más resabio de sal o albor de cúmulo
que sola prisa de acosada espuma...

Muerte sin fin [fragmento]
José Gorostiza

 

Maravilla de fragmento de ese excelente poema de Gorostiza. Un gran honor que compares con él mi humilde poema. Muchas gracias por la lectura y tan amable comentario. Un abrazo, fuerte, Pedro. Luciana.