Sueño canadiense

te sientas en la acera como para saltar del puente
más alto mientras esperas el taxi / te nublas
hundes los pies en el océano del pavimento
estás nublada y ahí dentro no hay cielo
una inmensidad hueca que quiere llover / romperse
derramarse / como si te despidieras de ti
porque no puedes llevarte a donde te vas
pero lo que no quieres es irte / y te estás yendo
nublada ya de estar tan lejos al mirarte
en los ojos de tu hija / la mayor / la grande
como si las fronteras septentrionales te invadieran
desde ya el sur que da al suelo y más abajo
como si en la mirada redonda de tu hija
la siempre pequeña / te miraras sin más bordes
y le besas la frente como si se la construyeras
con besos / como si ahí te sembraras / hija mía
no te hagas árbol hasta que pueda ser tu sombra
quisieras decirle / pero no sabes cómo
cuida de tus hermanas / que yo mandaré nuestra casa
ladrillo a ladrillo / como la que les construí
sobre mis rodillas / castillo enorme de puras ventanas
por donde ustedes corrían montadas en su risa
les mandaré dólares canadienses / tres bicicletas
y mi corazón pedaleando / eso quisieras decirle
a tu hija / a tu hija / a tu hija
pero solo aprendiste a decir / no lloren / llorando
no aprendiste ni las fórmulas del adiós
y quisieras decirles / la abuela estará con ustedes
mi corazón arrodillado fregará pisos en Quebec
hasta encontrar / sacar / adorar el brillo de sus ojos
como cuando buscabas flores brillantes
entre todas las palabras para nombrar a tus hijas
Magnolia / Jazmín / Alhelí
cuando eran apenas algo latido / latiente y alado
en la reciente parcela de tu vientre
eso quieres decirle a tus niñas / pero en cinco minutos
han crecido toda su vida / ya no las ves / ya no te oyen
han crecido tanto / horizonte / mientras tú / nublada
te has hecho diminuta / chiquita /
como para guardarte en tu puño
y secarte los ojos mientras el taxi
se aproxima a la estación

5 de junio de 2023​

 

Puedo sentir el chirrido de un corazón desbaratándose, el dolor de la piel que se deshilacha por irse...
¡Mierda, cuánta tristeza!
Abrazo, sin chanclazo (hoy).

 

El poema conmueve por retratar vivamente esa situación tan difícil de la inmigración. Unos versos dicentes y que no dan tregua. Un gusto leerte. Abrazos.

 

Cuánta gente de mi país se ha ido a distintos destinos del mundo en estos últimos años sin que a la dirigencia les importe un coño, más allá del descrédito político internacional que les produce y que les obliga a mandar uno que otro avión para traerse de regreso a cien, de los seis millones cien, que se han ido.

Cuánta lágrima, cuánta angustia, cuánto dolor regado y rodillas en los pisos bien fregados.

Tu poema me da coraje, compañero; coraje por la verdad que expone. Decir magnífico es poco. Gracias por decir. A lxs poetas nos queda es decir las cosas.

 

Hay mucho más que lirismo y tristeza en este poema, hay un realismo desgarrador y una lucidez crítica que solo pueden brillar y transformarse en belleza por medio de una pluma muy curtida y talentosa.
Verdaderamente da gusto y es una enorme satisfacción toparse de vez en cuando con poesía de calidad en el foro. Es un muy buen poema, querido amigo. Abrazos, felicitaciones y un brindis cervecero a tu salud, Don Pedro.

 

Te leo y siempre me conmueves, pero ahora la resonancia es tremenda y duele leerte. Un placer la lectura.