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El viento susurra una dulce canción esta noche
la luna nueva, en algún lugar del cielo espera recuperar su fulgor
pero aquí, carne y hueso somos
miles de ideas revueltas
locos, raros, somos nosotros
la perversidad encarnada, hermanos por elección
cuatro jinetes sin apocalipsis
recostados en el cemento
reconociendo formas en las nubes
escuchando los arboles
y esperando que ese momento de silencio nunca acabe…​

 

Un Saludo a los cuatro y espero que ese silencio se pierda y lo recuperen muchas veces mas, solo se aprecia lo que no se tiene permanentemente....Hermoso compartir silencios....Un gran silencio con palabras escritas para ustedes....

Mueranse (va?)​

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Asi sea Mayba jeje.. besos