93.

Encontré lo que sobró de un sueño
y lo escondí bajo llave.

Choqué contra una ventana que no se abría
y la arropé bajo la sombra de un árbol.

Arrastré un hilo de tiempo
y le hice un moño a la realidad.

Crucé un río de palabras
y pronuncié tu cuerpo de memoria.

Perdí la costumbre en un sendero
y el viento me devolvió la sonrisa.

Caí en la cuenta
de que sin tus acordes
las flores durmieron todo el invierno
y yo quisiera ser como ese tallo,
hamacado
por un viento de música.

 

Qué dulces tus versos amiga...siempre es un gusto leerte...
Te abrazo con todo mi cariño...

 

Gracias, amiga!!
abrazo gigante para vos también!!

Diana

 

bien llevado el sentimiento que expresa en cada verso, me ha gustado pasar a leerle, que tenga buenas noches.

 

Me alegro mucho... bienvenido, entonces!!
abrazo!!

Diana