Al peregrino distante

AL PEREGRINO DISTANTE




Peregrino que vives en mí,
Cuanto as recorrido con esfuerzo voraz
Andariego de aspecto fantasmal,
Vives aquí y al mismo tiempo no estás.

Cuantas noches te pensé,
Cuantas mañanas te imaginé,
Cuanto te llore,
Cuantas cosas sentí y por vergüenza callé.

Forastero en grandes lugares,
Siempre apreciado por tu naturalidad,
Mi hombre inspirador,
Dueño de mis canciones, poemas y escritos
Guerrero involuntario en mis batallas,
Culpable directo de mis victorias,
Todo esto y más, eres, y aunque nunca lo sepas, lo eres.

Esperare tu regreso con paciencia,
Confió en que pronto tu camino y el mío
se volverán a cruzar,
y te diré sin temor alguno
todo lo que te deseo ofrecer y ansió dar.

Nadie piensa más en ti como lo hago yo,
Te metiste en mi cabeza sin visa,
Y te ganaste un boleto directo al corazón,
Pero jamás fuiste un pasajero,
Siempre fuiste el motor de aquel avión
Que al final descubrí que… ¡Era yo!

¿Que mas puedo decirte?
Se que de algo estoy segura,
Ni el mismísimo Neruda,
podría escribir en versos
lo que sentiría con uno de tus besos.

Mi gran amor atrapado
en un libro no publicado
Dime Peregrino distante,
¿Qué hacer con todo lo que siento?
¿Como si vives en mi de ti olvidarme?,
¿Cómo dejarte ir si no quiero?

Solo háblame peregrino
una vez más como lo haces en mis sueños
Y dame la solución para curar este dolor
Que lastima al corazón y atormenta mi razón.

Los días pasan, y todo sigue igual
Tu, caminado por caminos no recorridos
Y yo deambulando cual alma sin sentido,
Fue la muerte peregrino, fue la muerte mi medicina
Que anestesió los sentidos y me regala la mejor misión
Cuidar de ti, ser tu ángel y brindarte protección.

Al peregrino distante

Cuando te conocí supe que eras diferente
E res aquello que jamás imagine conocer
Siempre siendo tu, siempre natural, y
Aunque estés distante, te siento aquí, por que vives en mí.
¡Recuérdalo siempre!