Apuesta sobre la hoja

A lo lejos se hincha el ojo

y en su carne de madero
busca en su pregunta

subir las escaleras/

ajustarse la visión

pasar la tarde en la
cabeza del manicomio

ser agua de lectura bajo
los balcones :

¿la mujer está o no está ?

y coge a su hombre

y lo desliza
como una carta bajo la puerta/

espera que la sangre se siente
en el ahogado

en el que esperó la ola azul

el andar sigiloso del reloj

en el crepitar de la sombra
del alfarero.

La mujer está en una manifestación de besos

reinvindicando su ocupación
en la nada

la mujer no está sobre sus ramas

hay un viento que huela bajo
y no la eleva.

Qué hacer con dos rocas
adheridas en el pecho

el tumulto es un brillo de gritos

la mujer...

el viento sabe la respuesta.

 

Tan profundo como las aguas del Callao hermano. Cada vez creces más y más, como la misma marea. Te felicito hermano.

 

Muy amable Amigo y supongo que ya conoces el grito de guerra del Callao que nos caracteriza a los chalacos

¡Chim pum! ....Callao

no te olvides de decirlo antes de comer tu ceviche y tomar tu Pilsen Callao.

¡Chim pum! ... Callao.

Cuidate. Un abrazo.

 

Bello poema amigo siempre tiene el toque de reinventar sus escenas, y mas con las manifestaciones de los besos de la mujer, y claro tambien me encataria pasar enese manicomio. Muy bonito poema me encanto leerlo amigo.

 

Muy amable María Jose. Siempre generosa. Saludos cordiales desde ESP.