Aunque no me ocupe

Iré camino del polvo,
cuando el polvo baje y se vea el paisaje,
cuando el río muestre su brillo,
mudo el pensamiento y sincero el sueño,
arderán las manos,
con ese frío indecible, y ese coraje anudando
la mirada.

Yo sé que no me ocupa, tampoco yo me ocupo.

Lo tierno es quizás
el hilo de la historieta,
también de la historia humana.

Lo fácil viaja en asiento privado, en esta sala
de canto hueco pero real.

Ir por las nubes como un muerto,
y ver la brisa caer de nuevo como caen los niños
al no saber caminar.

Ese es el drama.

Porque sé que está bien que no me ocupe.
Yo sé bien y no lo sabe que es lo justo.