Barca de Caronte

Mil años trabajando había pasado

En su barco, Caronte, ocupado


Cero focos y pocos eran los entes

Que, tomados por locos, mentaron

Algo más que banas idioteces

Que por años al susodicho torturaron


Será qué en el limbo, lar

De Caronte y su malestar,

¿No hay bondad que constatar?

¿Ni hay ideas que talar?


En este abrupto mar

Que solo el más experto

Tuvo valor de zarpar


¿No hay razonamiento?

¿Ni razón para mofar?

¿Nada más que tormento?

¡Cómo lo voy a aceptar!


¡Que todos los mares vengan

Y observen estos haceres!

¡Que todas las nubes salgan

Y truenen estos seres!


Y cuando el vacío devore

Lo poco que del mundo quede

Cuando las lágrimas lloren

Por la soledad que se vende


Echarán la vista atrás

¿Realmente estaban de más

las inhóspitas falsedades

y las más crudas realidades?