¡Corazón, entiende ya!

No.
No corazón.
Te sentencio a no enamorarte.
Queda prohibido sentir amor.
No. Debe quedar claro.
Nada de extrañar lo que no te han regalado.
No. Hace mucho que el cariño
ha sido exiliado...
Está condenado a no volver.
Estas tierras han sido secadas por el dolor.
No tienen vida propia
y tu debes entenderlo corazón.
¿Por qué insistes en latir?
Te he ordenado que te detengas.
No existen argumentos
para buscar otro dueño.
Haz sido condenado a la soledad,
te he sentenciado al silencio.
Cada cosa que se parezca al amor,
es enviada al baúl de los recuerdos.
¿Es que no lo entiendes?
No nos quieren...
ha quedado claro.
Por más amor que sintamos,
no nos corresponderá...
Y ya con tu insistencia he vuelto a pensar.
Ya me haz hecho enfadar.
Te pido que lo dejes de llamar;
por más que grites su nombre,
el no regresará.
El ha decidido no volver amar,
y por más que lo busquemos
no volverá.
Es mejor que te vuelvas a congelar,
el amor no se hizo para nosotros.
Corazón, no lo llames más. ​