Deja que me enrede en tu sonrisa

Como la hiédra trepa por las paredes
trepa por mí,
deja que me enrede en tu sonrisa,
como la luz de la mañana
inunda mis pupilas
inundame, llename de ti,
como el agua va llenándo
espacios huecos.
Devora en tus ganas
mí conciencia,
mis manos agradecen el milagro
de unirse con las tuyas,
y mí cuerpo se envenena de deseo
cada vez que me rozas con tus labios.
Atrapa con tus sueños mis delirios,
convierteme en historia de tu vida,
hazme vivir de nuevo
la juventud divina que marchó,
un instante del tiempo ya olvidado,
convierte mí esperanza
en ganas nuevas,
en ansias de pasión en melodías,
que traigan a mi vida la ilusión.​

 

Buenos deseos poeta, buenas imágenes que le dan
color a la lectura. Como simpre disfrutando
de tu poesía...

saludos.

 

Gracias querido compañero por bucear en el lago de mis versos un abrazo

 

No creo que a ti se te haya marchado ni la juventud. Al menos lo que yo veo en cada poema tuyo es un muchacho enamorado que, como mucho, anda rondando la treintena.

Gracias de nuevo por tus letras, Rafael.

Un beso

 

GRACIAS POR ESA JUVENTUD ATRIBUIDA QUE ME DELVOLVEIS CADA VEZ QUE OS SUMERGIS EN EL OCEANO DE MIS VERSOS, UN ABRAZO

 

Como siempre es un placer leerte y perderme en tus palabras, una hermosura de poema... Un abrazo!

 

GRACIAS MI FIEL COMPAÑERA DE VIAJE GRACIAS POR PARAR EN LA ESTACION DE MIS VERSOS, UN ABRAZO