Desde lo alto...

Cuando ya en la cumbre diviso el paisaje
no importa la herida ni ese tiempo aciago
si llegué a la meta fue por el coraje
que le imprimo a todas las cosas que yo hago

Desde este horizonte se aclara el camino
se divisa el paso tatuado en mi historia
siento cierto orgullo porque en mi destino
a pesar de todo, alcancé la gloria

Un crisol tortuoso plagado de espinas
heridas que el tiempo me ha cicatrizado
de aquellas aristas limé las esquinas
para que el que siga no sea lastimado

Cerní de mi vida las cosas ingratas
dejando mi cielo totalmente claro
mis horas de angustia las vendí baratas
y he guardado solo lo que creo que es caro

Con estos tesoros que guardo en mi alma
como el optimismo que presumo tanto
me dan fortaleza, esperanza y calma
me dan la alegría que tiene mi canto

Estar en la cima fue solo un proyecto
y en esta rutina obtuve un legado
que todo es posible si tu andar es recto
honesto, piadoso, gentil y educado

Puse en la mochila latas de alegría
ilusión en bolsas y mi fe en su envase
algunas promesas que cumplía en el día
y muchas plegarias contra lo que pase

La mejor comida se la di a mi mente
y en cada experiencia se nutria en exceso
a veces el tiempo se volvía inclemente
(me dio mi confianza en la boca un beso)

Hoy en el balance de esta mi aventura
doy gracias al cielo por sus simpatías...
una gran herida con buena sutura
no hace cicatrices y hereda alegrías.

Salvatore*

 

La plenitud se dibuja en tus versos amigo... un recorrido que hace grande...gracias por compartir...
Te abrazo con todo mi cariño...