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Diario. 15/10/20205

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por Troto, 14 de Octubre de 2025 a las 7:11 PM. Respuestas: 0 | Visitas: 43

  1. Troto

    Troto Pablo Romero Parada

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    Hoy no quise tan si quiera intentar hacer running. Ayer bajé tanto mis tiempos, y el dolor de las piernas era tal, que decidí darme un dia de descanso. No soy un deportista de por sí, solo alguien que intenta beneficiarse del deporte y cuidarse. También intento escribir con ese propósito.

    Al parecer María se vuelve este fin de semana y ya tenemos acordado plan para el domingo. El lunes trabajo en Laxe así que tendremos que ponernos de acuerdo exactamente en como nos organizamos. Es posible que salgamos por ahí si hace bueno o que nos quedemos en casa si llueve. Tengo ganas de conocer a Simba, su gato. Y de conocer a María también su sofá y en otras partes de su casa.

    Me sigo sintiendo muy cansado y eso que me levanté tarde. Hice la comprá y admito que me comí una bolsa de patatas rufles sabor a sandwich mixto. Esa bolsa de patatas es mi perdición. El resto del día comí bien. Fresas, franbuesas, almejas, leche con avena... fue un día delicioso. Un gran día libre. Mañana quedé con mi amigo Santi. Puede que nos veamos en Ferrol porque tiene a su padre enfermo y no quiere abandonar la ciudad, pero si su madre se queda cuidándolo, es posible que se venga él A Coruña y de paso nos veamos. No le pregunté a que se debe esa necesidad de venirse A Coruña, talvez debí preguntárselo. Mañana lo haré. Es dificíl diferenciar cuando uno es demasiado asfixiante o distante.

    Todavía no he encontrado un libro que me nutra como lo hacía el de Murakami. Estuve leyendo unos capítulos de Guerra y Paz. La lectura me aburre aunque es muy placentera la forma en la que está escrita. La lectura es placentera en general pero a mí es fácil aburrirme y más con la lectura. Soy muy especialito a la hora de encontrar lecturas que me entretengan lo suficiente. Espero no tener que gastarme el dinero en otra novela de Murakami o de Nothomb, aunque mucho me temo que si quiero disfrutar leyendo no me quedará más remedio. También leí unos capitulos de un libro de Thich Nhaht Hanh. Es difícil disfrutar de la sabiduría budista si no es con la ayuda de mi terapeuta o de mi profesora de mindfulness. Como con cualquier disciplina, para ahondar en el conocimiento es valiosísimo encontrar a un buen profesor.

    Parece que las bacterias de mi estómago van cesando y eso que hoy comí esa bolsa de patatas. Aunque los ataques de dolor suelen sucederme mas bien por la noche y las Rufles las tomé de mañana. Parece que no contagié de esos dolores a María. Me siento muy ilusionado con ella. Recuerdo cuando era un adolescente enamoradizo. Antes de enfrentarme tanto al amor y de buscar mujeres en situaciones demasiado complicadas para mí. Mujeres que no podian hacerme feliz en cualquier caso, porque yo tampoco creía que ninguna mujer tuviera ese poder. Empiezo a abrirme y a parecerme a ese adolescente que soñaba con dar besos de instituto y que todavía se fiaba de la realidad. Que no creía que la vida era un constante intento de vacilarme. Que no creía que sabía constantemente que andaban a pensar el resto. Las mentes ajenas son todavía más desconocidas que la propia. Las motivaciones del resto de las personas son muy difíciles de descifrar, e intentar hacerlo con el corazón cerrado es directamente imposible.

    Su mirada bajo la puesta de sol en la playa resulta fiable, tierna. Mi corazón se ablanda y no teme malos tratos. Como mucho la llegada de un futuro indescifrable en la que no hay un dolor mayor que el de los futuros descifrables. Una vida parecida a la que vivía en el instituto, con chicos y chicas sabios por su ingenuidad. María me recuerda a eso. A Mar y a Iria, pero todavía más sana. Todavía más cuerda y rica.

    Algo me dice que aunque esta historia de amor termine, no habrá en mi vida un sufrimiento tal que oscurezca mi mente. Sino que continuaré con esta ligereza mental por la que hace años sentía culpa pero que ahora entiendo es la mejor manera de experimentar mayor plenitud. De ablandarse no de irresponsabilizare.

    Los dolores y las emociones complicadas que surgen las abrazo con la esperanza de trascenderlas. Espero que así sea. Y espero seguir mirando los ojitos de María.
     
    #1
    Última modificación: 14 de Octubre de 2025 a las 7:25 PM
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