Ecos en el tiempo

Somos ecos del tiempo
colgados en el horizonte,
donde aguardan las mañanas
y se esconden los ayeres.

Viajamos entre silencios
que pronuncian lo que fuimos,
y en la bruma del ahora
nos dibujan los destinos.

La memoria nos sostiene
como al árbol su raíz,
pero el viento del presente
nos empuja a ir sin fin.

Somos luz que ya fue sombra
y es promesa en la alborada,
somos lluvia que en el aire
ya se sabe evaporada.

Cada paso es una huella
que el olvido irá borrando,
mas el alma se engrandece
cuando aprende caminando.

Somos tiempo que se piensa
en la espera de sí mismo,
somos sueño que regresa
a su antiguo paraíso.

Y al final, cuando el instante
se disuelva en el misterio,
seremos solo un susurro...
el más puro, el más etéreo.