El flautista

Les confieso un gran secreto.
Este plan se puso en marcha.
Los libros abren misterios,
y empieza a sonar la flauta.

Así comienza el encanto
con un desfile que arranca
y una fila de encantados
en dirección a la casa.
Un mar lleno de ratones
y muchos niños que aclaman.

¡Préstenme mucha atención!
Todos desfilen al cuento,
quiero que soñando arriben
a la clave del encuentro.
Una vez que pase el último
que nadie pierda su tiempo,
¡cierren bien rápido el libro!
Aquel que lo haga a destiempo,
mucho tiempo habrá perdido.
¡Por favor, deben creerlo!

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Quienes no quieran hacerlo
jugarán más que un ratón
con ratones de a montón.

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El libro debería cautivar a los niños y no hipnotizarlos. Un abrazo, José Luis.

 

Gracias, estimado poeta, me fue llevando la intertextualidad. Revisaré lo terminológico. Aunque las palabras "encanto" y "embrujo" tienen también un sentido positivo y nos acerca al efecto poético -pero... no sé -. Un abrazo

 

Por cierto ¿quién es Eva?

 

Me equivoqué, Sergio, saludos.

 

Agradezco María tus amables palabras, saludos.

 

Pronto se afanarán los niños a la lectura con solo leer estas maravillosas letras de tu autoría y es que leerte, amigo José Luís, es coger afición a la lectura...Muchos besos para ti amigo con todo mi cariño y colmados de admiración......muáááackssssss

 

Estoy profundamente agradecido por tan amables palabras, amiga. Lo mejor que uno desea escuchar es que animan a leer. Un afectuoso abrazo para vos.

 

Agradezco el comentario, estimado poeta. Es lo que buscaba, la rebeldía, que decidan, que corran riesgo al optar por gozar del libro, saludos.