Él más noble de todos los ángeles

El más noble de todos los ángeles, del que pocos conocen nombre alguno,
Su rostro no demostraba culpa,
Habló en lenguaje intemporal, su agresividad fue elegante, reinó sin corona…
Es sin duda alguna, el más desgraciado de los ángeles…
Sus alas imponentes ya no quiso utilizarlas, porque tenerlas es poder volar sobre el gran abismo, y el volar es un esquivar –según su pensamiento-…
Agotado por la experiencia, hastiado ya y quizás –ya pervertido, gustaba contemplar el abismo, aunque nunca pudiendo alcanzar el fondo con sus ojos; los cuales a ese tiempo volvieron-se más azules.
Un día, sin otra opción, se lanzó a la inmensidad, no sin lágrimas verdaderas, aunque -pasados eones- no ha alcanzando su fondo.
Esto lo sé, porque escucho sus gritos…ahora en este mismo instante –como durante toda mi vida-, si no supiera que a pesar de todo es un ángel, diría que esos gritos desesperados son muy humanos.