Epitafio de un amé

Epitafio de un amé



Soy,

somos,

fuimos,

¿seremos?



Lo dudo...

Las evidencias

demuestran

que amar

es un sentir

que incluye dos latidos.



Un corazón en soledad

solo retrasa su destino,

a saber,

caer...



Saberse ausencia,

no un amar,

no un cuerpo que desea,

sino un vacío.



Uno que ni La Soledad

ni El Suicida sabrán cómo llenar.



- Pensé que los versos eran suficientes para mantenerle vivo, cuerdo.

Comentó La Soledad.

- Hay ausencias que nada ni nadie pueden subsanar, de eso murió, del vacío que al final lo llenó. Dijo El Suicida frente a la tumba.

-¿Crees que al fin podrá hallar la paz del olvido? Cuestiona la Soledad.

- Conociéndolo, aún en el infierno, buscará quien a Ella ha llevar esos versos escritos...Declaró el Suicida.

 

Interesante diálogo. Me ha gustado.

Un fraternal abrazo:
Maca López

 

Así suelen ser esas conversaciones de madrugada...