Esa sonrisa que se va, cuando vuelva...

Esa sonrisa que se va, cuando vuelva...

Corriendo vas,
tu pelo suelto va;
el aire por tu pecho
libre lo veo pasar.

Tus ropas flotan,
flores renacen
en cada paso que das,
con cada risa que das.

El mundo a tus pies
feliz te deja andar.
Anda sin mirar atrás,
lejos de mí…

¿A dónde marcharás?
¿A dónde irás?

A dónde marches,
bajo una sombra,
o en lo alto de una loma…
Ahí deberás vivir.

Deja éste lugar…
¡Ve hacia allá!
Lejos de todo,
lejos de tu hogar.

Ahora ahí debes estar…
Mora con fe,
que nuestras miradas
se volverán a cruzar.

Pregunto al viento...

¿Cuánto tiempo irá a pasar?
Para que vuelvas por dónde vas,
y sentir tu abrazo…
¡Una vez más!

Allá harás tu hogar.
¿Qué será de ti?

Esa sonrisa que se va,
cuando vuelva...
¿Qué pensará de mí?
¿Te comportarás igual?
Ó simplemente me ignorarás…
Dime, ¿te olvidarás de mí?

Crecerás, caminarás y tropezarás;
te levantarás, sonreirás y andarás.
¡Aquí te veré!
En éste mismo lugar,
¡Una vez más!

Aquí te esperaré;
con rosas,
¡Miles de rosas!
Las que no llevé aquella vez.

¡Y algún día cruzarás
esa puerta del más allá!
Algún día, con mis ojos
llenos de lágrimas;
feliz, veré que pasarás,
de lado…

Sin saber que atrás,
Abandonas…
Al que esperó,
verte una vez más con esa sonrisa,
que suponía... deber amar...​

Vlad Kanon​

 

Buen poema, tiene ritmo y dinámica y las palabras no se forzaron en tu experimento con ellas!
Aconsejaría una lectura atenta del poema, para apreciar el motivo por el cual las palabras se usaron.

Saludos Vlad!