Expiro...

Expiro

de tan deseada comunicación a través de las letras en la ventana del cielo, en el vacío existencial, en el relleno de mi mundo, en el fondo de un barranco, en la angustia del miedo, en la terrible experiencia de las emociones incontenibles,

expiro

pero antes hago un recuento del sentimiento que me ha llevado a explayarme, hablando en el papel del sinsentido de esas emociones que me embargan, saliendo al exterior en forma de lágrimas,

expiro

quedándome claro que disfruté de hablar con el mundo de mi yo interno, de mis dolores, de mis preocupaciones, de mis expectativas ante ese cielo que me arrolla, cuando mi alma en pena desdibuja la alegría de vida

expiro

habiendo disfrutado de la soledad contenida para valorar las relaciones en un mundo donde cada día la sociedad es más individualista, donde la agresividad está al acecho para desplegarse y atacar con descaro a la paz que tanto se necesita,

expiro

cuando mi corazón y mi razón se han hermanado para entender que la vida son las dos caras de una misma moneda y lo que te da una, te la quita la otra y viceversa, y en el terreno la lucha está entre una y otra, veces me llevo algo positivo como negativo,

expiro

de este mundo de las letras porque ahora voy a vivir en el exterior de mi mundo, a disfrutar del aire libre y a sentir la experiencia grata que te da la vida,

expiro

por la decadencia de mis letras, porque todo tiene un principio y un fin,

y hasta aquí llegué agradeciéndole a la vida la enseñanza que me ha proporcionado, el alivio de mi alma al descargar todo eso que había guardado durante tantos años en mi ser,

ahora soy libre, usaré mis alas imaginarias para volar y dejar abajo las penurias, alegrándome en cada encuentro con la vida,

expiro

orgullosa de haber contribuido a parir letras, ahora escribiré para mi cielo, mi mundo, mi yo interno,

agradezco a un portal donde he guardado mis letras y las seguiré guardando hasta que el día que me muera, que se perderán, ya que solas quedarán,

gracias a los compañeros que me acompañaron en ese trayecto de tantos años, donde algunos se han ido antes a descubrir un mundo nuevo

y gracias a los que han quedado, que no son muchos pero a ellos se ha incorporado un gran hombre, con muchísimos valores, al cual estaré eternamente agradecida, Alde, hombre humano y empático con todo el mundo,

gracias, gracias, gracias hasta aquí llegué desde el año 2009 en que comencé a escribir

 

Rosa abierta, luminosa
Fruto espejo
de tu pequeña boca

El punto central
es decir sin fijar

Lo que hoy es verdad
quizá mañana no


¡Un saludo! Y gracias por compartir.