Gestación en la posada

Un poema que retoma el tema del encuentro casual entre dos personas, pero esta vez se trata solamente de un motivo para recordar a las desaparecidas “Posadas de La Habana”, versión cubana de las casas de citas, con la variante de que en este caso, muchas parejas casadas, acudían a estos “hoteles” por no contar con un hogar para desarrollar la vida conyugal normal. (Tenga en cuenta que el poema está cumpliendo ¡50 años!)

Vaga a raudales la vida en la dinámica ciudad.
Hombres y mujeres se buscan y se encuentran en todas partes.
Corre el amor entre el tumulto de las grandes avenidas,
hasta vibrar con nerviosismo
ante la puerta de un cuartucho humilde
en la soledad de cualquier triste posada de La Habana.

Allí,
la vida transcurre en otro siglo
tras el olvido de las miserias que acaban de ocurrir
en otras dimensiones.

Allí,
el mundo pierde su falso sentido,
y los amantes olvidan sus ropas en cualquier parte.

Nace así el día, de la noche.
Nace el amor, de los misterios.
Nace el todo, de la nada.

Después, hombre y mujer,
día y noche, amor y misterios,
todo y nada,
viven su gran momento…

¡Oh naturaleza!,
bendito el hijo que vive en las entrañas,
gestado por obra de la casualidad,
en la tranquilidad nocturna y surrealista,
que existe en cualquier cuarto,
de cualquier posada,
en la soledad de una triste noche de La Habana.

Frank Calle (7/feb/1969) - ¡50 años!

 

Pues, realmente enfocas una realidad contundente... y no solo es la Habana, lo es en todas las capitales y pueblos del mundo.
Y que hoy gracias a tus letras... logra una connotación más visceral. Excelente mensaje compañero. Y, así pasen otros 100 años,
la historia de nuestras vidas; siempre será la misma. Un abrazo virtual compañero.
Cordialmente:

 

Nuevamente muy agradecido. He aprovechado hoy para rescatar algunos poemas de entonces. te agradezco mucho los comentarios. Yo debiera hacer lo mismo, aun cuando el tiempo que tengo de conexión es solo de 2 horas, que debo optimizar, porque dentro de ese tiempo debo responder correspondencia de profesores y estudiantes que por alguna razón necesitan escribirme.

Es cierto que se trata de una realidad cosmopolita; supongo que en otras capitales los amantes "legalizados", llevan su matrimonio de forma similar, o en condiciones absolutamente inaceptables, de hasta más de dos matrimonios conviviendo en el mismo espacio, y sin tener la posibilidad de ir "a una posada" , para poder mantener la vida conyugal normal.

Por suerte, mi esposa y yo jamás tuvimos que vivir tales experiencias. Desde que nos casamos, aunque viviendo con la familia, como era casi normal desde entonces - y hasta hoy- siempre tuvimos el espacio para llevar nuestras vidas y criar a nuestros hijos.

Un abrazo,

Frank
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Enhorabuena. Un poema magnífico. Gracias por compartirlo. Ah, y la introducción es necesaria. Gracias por incluirla.

Un saludo desde Galicia.

 

Muy agradecido Adrián, es grato saber que le ha resultado interesante el poema.

Un abrazo,

Frank
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