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Hacía calor y el Talismán Hiperbóreo…2

Tema en 'Poemas Góticos, ciencias ocultas y Misteriosos' comenzado por Solsticio de primavera, 5 de Junio de 2008. Respuestas: 2 | Visitas: 585

  1. Solsticio de primavera

    Solsticio de primavera Poeta fiel al portal

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    Hacía calor y el Talismán Hiperbóreo…2
    Cuando John Pig conoció a Apironthe IV
    Cofradía de las Potencias​



    esta poesía son muchas poesías en una poesía, por eso hay tantos títulos poéticos, los arriba mencionados son sólo tres de sus acepciones,
    el lector puede, o debe mejor dicho, tachar con lápiz o crayón violeta
    los títulos primeros, para así marcar, como la yerra marca las frentes de los natalicios,
    el título que os de la gana.
    Primordial, este hecho TIENE que acontecer antes de leer el texto subsiguiente.

    …denle un nombre al pequeño monstruo y a cada uno de sus tentáculos cartilaginosos:
    ámenlo como si él fuera su hijo…


    La primera insignia es casi embrionaria, y prevalece, y nos segrega en clanes
    con la yerra
    en las frentes.
    arabescos y movimientos de luna




    …Hacía calor,
    los abanicos pluviales son muy escasos en las Indias,
    circundaba, tirando de la rienda de mi covallo, las murallas
    colosales del Palacio.

    Me habían llegado noticias, tiempo atrás, que uno de mis alter egos
    había sido víctima de una quejumbrosa cefalea. ​

    Apironthe IV yacía hundido en meditaciones,
    ya no se lo veía pasear por entre los jardines de gigantescas flores
    y cordones de siemprevivas. Tampoco se escuchaba el repiquetear
    de su búfalo albo, cuando alzando su tridente al espacio, recorría
    las calles de la pobreza, y, desenjalmando en cada boulevard,
    lanzaba un rayo escarlata hacia el cielo fuliginoso, que se abría, estupefacto,
    arrojando cataratas de manzanas inyectadas en fuego, y que, al estrellarse
    contra las tiendas de paños traslúcidos y paseos mercantiles, se disipaban entre
    vapores violáceos y transparentes, brotando ulteriormente Sapos de los Lagos del
    Titicaca, que afilando la lengua contra sus vainas, disparaban intermitentemente
    contra los moscardones anglosajones…


    A pesar de la emotividad de este relato, seguía haciendo calor, y mi tiempo en el
    MUNDO
    del otro ego se acababa. -No es fácil
    abordar la vida de uno con el semblante del otro (ni la vida del otro
    con el talante del otro). Dos energías coléricas y rojizas galopan como
    astros de grandes dientes punzantes azuzándose constantemente
    a la colisión. Sus estelas dentellan al tocarse. Por eso, entre muchas razones, no puedo
    perder mi tiempo en explicarles con mayor detenimiento el devenir de los hados, tengo
    que ser RÁPIDO
    y sigiloso: cruzar las murallas como restingas y burlar la guardia del Maharajá; antes que
    las arterias del tiempo se ocluyan y algunos de mis egos lo impela
    la fatalidad de un paroxismo.​



    -¡Maldita imaginación, tus artificios y sortilegios son tan intransigentes
    y tenaces, que atiborras de faquires encantados y tembloroso,
    los pasillos y los balcones del Palacio! Mi lazo maravilloso no podrá ascender la vertical empalizada sin que los faquires y los recuerdos sicarios de latrón lo descubran
    y den alarma a la conciencia. tengo que ser sigiloso tengo que ser sigiloso….

    Quiérome coger a cada especie, a cada elemento del planeta, y sin embargo,
    mi verga ensangrentada y henchida por chancros
    no puede penetrar las inmediaciones que yo mismo fabriqué. ¡Ay, que difícil
    es conocerse
    y sortear como un taladro
    los frontispicios polvorosos y mohosos
    de la inconsciencia! !Ay! Sin embargo…., yo conozco la hendidura,
    el zócalo movible y ansiado,
    el subterfugio
    dentro de la bóveda hermética de añil.



    No puedo dejar de notar, inclusive con gran tristeza, las huellas impresas
    en mi alma
    por las botas de espuelas argentadas
    de Maldoror. Pronto te asimilaré, así, volviendo a mi forma
    ORIGINAL,
    no tendré que lamentar el grito agónico de mi Voz alada. ni las momias ni las momias…

    Ahora bien, (…), esto raya el sinsentido. Señales de un exterior
    SUMISO
    se apresuran a despojarse de sus ropas a modo de: bocina,
    bramido exultado, miel, etc…Ha metido un gol Boca, y este “accidente
    urbano” ha causado que por poco los cometas escarlata, de climas
    árticos y simúnes , de constante actitud pendenciera, colisionen,
    sacándome del predio quimérico, e intimándome a actuar como infanticida.
    Volvamos a la historia, antes que muera alguno de los dos…

    John Pig giró su sombrero tomándolo por una de sus puntas
    y, descendiéndolo gradualmente, cubrió su cuerpo entero. Al cabo de unos minutos,
    y agradeciendo los consejos de Michaux, John Pig se metamorfoseo
    en una Mariprosa hermosa y esplendente, de alas oceladas y félidas,
    y greda luminosa y volátil. Así, maquillando su nueva sombra, emprendió viaje
    como Mariprosa desde los saleros del desierto yuxtapuesto (a las atalayas), por encima
    de los faquires y murallas, a por el balcón del Marajá.

    Una vez posado sobre el barandal de alabastro, plegó sus alas y, destilándose
    con tino, se desprendió de aquella estepa marmórea para circular cada
    balaustre con serenidad. Así fue que al fin llegó al vértice inferior
    del semicircular mirador, y mimetizándose contra los repliegues de las cortinas
    suspendidas logró
    APROXIMARSE
    al Monarca, para atracando en uno de sus hombros,
    cerrar el doble par de alas de escamas imbricadas.


    Hacía calor…
    sobre el hombro de su Alteza me era fácil de comprobar, su Realeza sudaba
    espesas gotas de salmuera que le hendían la frente, y la agrietaban
    TEMPESTUOSAMENTE.
    Él se encontraba sentado, rígido, como en un trance letárgico, sobre
    el sillón enfrentado al bufete. Sus ojos inyectados en fuego, fuego
    que se arrebujaba alrededor de sus pupilas, pupilas que vislumbraban un papel
    con nuevas fórmulas, fórmulas que no son más que mirar hacia el
    INFINITO.
    –“!Qué enigma es el que te absorbe, Apironthe, que has olvidado
    a tu pueblo rezagado y abrazado a la brutalidad!? !Dime, oh, Majestad!
    Eso es exactamente
    lo que John Pig, trastocado a Mariprosa, quería averiguar.


    Dos frases repletas de hipótesis más carentes de silogismos
    se apuntalaban en el vetusto manuscrito. Su mente esquilaba
    el antiguo Cristal de Hielo, pero ni de esa manera podía encontrar
    su centro. ​

    Una frase decía:
    -Dijo también Abram: Mira que no me
    has dado prole, y he aquí que será mi he-
    redero un esclavo nacido en mi casa.
    -Luego vino a él palabra de Jehová, di-
    ciendo: No te heredara éste, sino un hijo
    tuyo será el que te heredará.


    La otra decía:
    -Entonces llamó el nombre de Jehová
    que con ella hablaba: Tú eres Dios que ve;
    por que dijo: ¿No he visto también aquí al
    que me ve?
    (Sarai, mirando una fuente de agua, cerca de Shur)


    -“Un enjambre innumero de astros son los que me ven, ninguno especialmente
    a mi, aunque todos saben que estoy”, repetía una y otra vez el Marajá
    anegado en los abismos más remotos y en las cavilaciones. -“Todos saben
    que estoy…, y nadie me reclama”. ¡Eso es Maharajá, monda el culto del falo augusto,
    acércate, acércate, estas cerca de la verdad…


    Tengo que ser rápido…, mi estadía como Mariprosa tiene un límite de tiempo, si
    vuelvo a mi fisonomía natural, y Su Alteza me descubre, podría
    colapsar el sistema cognitivo que nos maneja, y más aún, posiblemente
    los piojos nacidos de las costras de mi lóbulo prefrontal se encarnicen
    contra….!basta basta! Basta de pensar…


    ¡Pronto!, Henry y el rey Bharat
    me mantienen de esta forma debido al sombrero, pero ya no sé cuanto
    tiempo más su embrujo, de mil anatemas, podrá resistir
    los embates infligidos por los guardianes inmateriales
    de la conciencia y la inconciencia. Doblan sus fuerzas, doblegan las mías, a cada intersticio
    los flancos de mi bandera son más pubescentes.

    ¡Si no vuelvo al sombrero antes que el tiempo culmine permaneceré encerrado
    para siempre en el cuerpo de esta frágil Mariprosa! Espíritu que
    arroba con sus vapores mágicos los pozos de magia, y embravece
    al condenado al cadalso, más es un espíritu frágil, más
    vigoroso. ​

    Bien, el tiempo es tirano (como la televisión), y maestro por concatenación, tengo que hacer algo, y hacerlo rápido: ayudar a Apironthe es una elección.


    Intrépidamente John Pig comienza a frotar sus alas imbricadas contra sí
    logrando la desmaterialización de parte de su exoesqueleto. Este polvo
    NUMINOSO
    permanece en el aire, e impelido por la gnosis de nuestro aventurero,
    recorre el cuello altivo hasta los párpados apesadumbrado. -¡Su Majestad esta
    llorando!, sus ojos irritados segregan claros aljófares diamantinos
    que mezclados con el sudor de su intento
    caen, como caen los imperios, y humedecen
    al manuscrito.

    El objeto de cañamo comienza a descomponerse, y las gotas
    allí monarcas embrotoñan la extensión, como así
    cada símbolo y exégesis. Al cabo de unos minutos
    la hoja se encuentra completamente reverdecida de un jardín
    viviente. No se ve nada más que una dinámica
    sempiterna y versátil donde antes una necrópolis. En ese instante
    Apironthe IV comprende el misterio, y exclama: -¡Comprendo!
    Luego vuelve en si paulatinamente, su mirada ha recobrado
    el vigor y la virtud de antaño.

    Se levanta ágil de su butaca, y con un chasquido de dedos,
    incinera el bufete y parte de su aposento, luego mira
    sin mirar, y ensimismado, como entablando una diálogo
    epistolar entre sus múltiples conceptos(los viejos y los nuevos)
    arenga en voz alta:
    -“ Hay tantos devotos en este Invierno, como espantapájaros en vuestras mentes,
    el hombre casi no lee sus libros sagrados, y se jacta de que comprende. Si
    la eterna salvación hacia el Oriente pendería de comprender estos libros,
    me preocuparía al menos en leerlos, y no dejaría que el devenir
    me instruya, ni aceptaría un ideal de “Bien” platónico
    acaparado en la Fé. Arma inigualable y holgazana. Abiertamente
    hablando, es más fácil aceptar que crear, pero esto
    ES ABSURDO
    y no tiene mérito alguno. No es culpa de la doctrina, es un ente
    inerte, pero de las personas es emblema. Alabarda invisible
    para nuestra división. (no creo que la mayoría
    de los pleitos estén racionalmente argumentados) ”

    desde las ventanas de todas las casas una vela ardía sacra
    mientras sus concubinos lanzaban las plegarias
    como boomerangs
    que retornaban


    Hablando de retornar, ya es hora de que vaya apurando esta historia, sino, debido
    a mi espíritu excesivamente ansioso, que, les cuento una infidencia,
    muchas veces llega a descomponerse debido a la blanca nieve, ……. Estoy seguro
    que algunos comprenderán a que me refiero, ¡Ah, zafiros de gargantas apretujadas!.
    En eso estábamos…;¡vamos!: ¡Voluntad no me dejes otra vez con los zapatos gastados!
    y la mitad del abrazo seráfico.
    Ahora bien, sin mal no lo remembro, era el turno del Rey Bharat….

    John Pig, aún presa de su última transformación, se regodeaba por la inteligencia
    acicalada del Marajá, una vez más, no lo había decepcionado, cuando preñado de
    un relámpago una Voz surgió de las concavidades de su mente: -“¡John Pig! ¡John Pig!¡necio animalejo de la tierna infancia, eres un torpe! ¡Soy yo, el Rey Bharat!"

    (recuerdo a razón de lo acontecido)
    Tiempo atrás, antes de aplastar a su tercer covallo por el peso de su cuerpo, John Pig
    había recibido un paquete y una misiva, sin remitente. Al abrirla descubrió: ¡Era sin
    duda la vieja caligrafía
    del viejo brujo, consejero segundo de Apironthe IV, el Rey Bharat! En ella
    se leía…

    Estimado John Pig,
    vuestro condiscípulo, Apironthe, se encuentra
    fraguado por una terrible enfermedad. Ve a buscarlo,
    y averigua el motivo que lo aqueja. Esta enfermedad
    se aferra como los líquenes a los neurotransmisores e inmoviliza
    a sus víctimas, equivalentes a tu idéntica luz. ¡Pero recuerda,
    recuerda que hay conceptos inmiscibles! Que el Marajá no te vea, bajo
    ningún pretexto. Espero, sin embargo, desde el seno helado donde aún
    se adormila Painefilu, que aquel padecimiento que irrita la sangre como una
    lechuza en un campanario o una sierpe en un pajal , sea sólo
    el hálito mezquino y quimérico de un dragón.


    Te entrego
    el sombrero con el que crucé los altos orbes, para que te sea fiel en tu periplo, y te
    acompañen sus poderes supremos (pero de poca duración). ¡Ten en cuenta
    la maravilla que te entrego si es que aceptas mi petición!
    (¡Vé en busca de tu Hermano bajo la protección profana del aposematismo!)


    Al parecer a este Viejo de mierda le gustaba escribir, ¡un yunque para mí!, y sigue:


    Si es que decides ayudarnos, y accedes a mis suplicas imperativas,
    te diré como llegar…
    …alojado como estas, en el bulbo raquídeo, sal de la hostería
    y dirígete hacia el Puente de Varolio, luego, alimenta
    los patos y cisnes que bojean impávidos, y crúzalo hasta arribar,
    pasada la madrugada, el mesencéfalo. Allí se encuentra
    el dominio del Marajá, y su morada….

    Atentamente, el Rey Bharat​

    p.d.: camina por el difícil límite de los dos hemisferios y que no te abatan
    las amenazas de gigantes Behemots.

    (fin del recuerdo de John Pig)

    Y ahora, ya me olvide por donde estaba…en fín, suenan campanadas, se acerca
    la hora del desenlace, ¡pero primero!, SUBTERFUGIOS….

    …sigue Bharat:

    -“Tú tiempo se acaba, tienes sólo un minuto para volver al sombrero
    antes que el encantamiento destruya tu horma
    (¡y te quedes en transformación Mariprosa, para siempre!)

    1:00 minuto​


    (Datos de interés: las mariposas, insectos diurnos o nocturnos del orden Lepidóptero,
    cuentan con tres pares de patas (en efecto, como todos los insectos), y dos alas de cada lado del cuerpo. Sus trompas son capaces de succionar líquidos y de enrollarse o desenrollarse a su agasajo. Ahora bien, el Sombrero del Rey Bharat transformaba al que se lo pusiera de cuerpo entero en Mariposa, con la diferencia relevante que, si el ejecutor era del sexo masculino se transformaría en una Mariposa Isabelina de la antigua Iberia, y si, en cambio, el verdugo del embrujo contaba con una vulva entre sus piernas, la transformaría en una Actias Luna, color verde lima, y oriunda del neártico. Indudablemente, son diferencias para tomar en cuenta.)


    0:55 de minuto​
    (si se contara en segundos ya no estaríamos hablando “del minuto”,
    la retórica conceptual es importante)


    John Pig, el Imbricado, roza con sus alas la oreja
    del Maharajá
    y emprende vuelo hacia la obertura del balcón
    no sin antes
    revelarle cosquillas en su tímpano izquierdo.​


    0:50 de minuto​


    ¡Nuestro aventurero atraviesa el balcón!
    (¡vuela vuela vuela oh nuestro aventurero atraca rápido en el sombrero!) ​


    0:41 de minuto​


    “Intenté cuidar cada pasaje con el mayor de los amores”, piensa
    JOHN PIG
    mientras sobrevuela las pequeñas mazorcas del inmenso vergel
    (de Su Majestad). –“!Vuelo, soy libre, no soy otro,
    ergo,
    soy!, quiere gritar nuestro heraldo, pero con
    pensarlo ya es suficiente. no icen sus banderas,
    no lo hagan, por amor...
    Raudo John Pig se
    APROXIMA
    a las murallas delante del corazón. Y por lo bajo
    atisba, como entre los pasillos y pasajes del Palacio,
    aburridos faquires parlantes se matan entre ellos y arremeten contra
    sus semejantes, los avizores de latrón.

    ¡Se incitan por que están aburridos!
    como vidrios cromáticos en los faros sobre montañas
    que sitian las ciudades. ​


    0:33 de minuto​


    Y es como de repente, sin previo aviso, un graznido oxidado
    y protervo emerge desde un bosque abierto de fronda
    y de coníferas, en las fronteras, a miles de kilómetros,
    del centro del mesencéfalo, hogar del
    Marajá.
    Mariprosa que se dirige rumbo al sombrero
    lo escucha, y ¡ay! que ha apresurado su vuelo,
    sabe que Cucurucho, El Pájaro Cuervo Protervo,
    pronto la alcanzará…​

    Sus alas de incomparable envergadura empujan aludes de aire
    que lo impelen hacia el dulzor frágil de un frenesí báquico.
    Cucurucho siente sangre de Poeta, su pico corvo y robusto
    se extasía saboreando la saporífera debilidad de la carne.
    Su plumaje azabache de irisaciones azuladas satinadas
    como la más impenetrable coraza.



    ¡Como Huginn y Muninn, tú, cuervo soso, encarnas
    a la inmaculada entelequia encargada de disciplinar! Pillán
    pilar del diseño estratifico.

    (ya han avisado los vigías del Gobernador)

    (no tengo espacio en este lugar)


    0:30 de minuto​


    Cucurucho llega a la muralla antes que Mariprosa. ¡Él es veloz
    como 2 erizos en un campo de alhábegas!
    (burlando a la liebre)
    ¡Pero no!, yo soy libre antes que liebre, ¡de mí
    no te burlaras!​


    0:27 de minuto​


    …Estaba tan cerca de terminar esta historia, tan cerca, por poco, se me alejó. ¡Y ahora
    aparece Cucurucho
    interponiéndose en el sendero (hacia mi sombrero)! -Dos
    mentes indómitas se miran fijamente en el ardor del nuevo aire,
    Mariprosa comienza a danzar bordando un lenguaje invisible
    sobre el fieltro, el Cuervo la circunspecta alzándose por el numen
    en volutas graduales. ¡Comienza la Batalla! imitan
    _________________una sucesión de piruetas
    ____________________________________y de
    ________________________________________acrobacias concé-
    ________________________________________________________ntri-
    _____________________________________________________________cas. ​

    Mueven sus cuerpos y se elevan como olas
    Turno1​

    La Mariposa gira en 97 grados y extiende su espiritrompa bajo el último rayo
    del atardecer. El látigo azota la mejilla siniestra de Cucurucho que emigra
    un aullido selénico hacia la cúpula maternal. Mariprosa liba e inflige
    50 puntos de daño a la gran corneja que se prepara para el contra ataque.

    Corneja Gerifalte bate furiosamente su plumaje
    librándose de la espiritrompa y expide esquirlas negras, mortales como tumbas.
    Mariprosa recibe 35 puntos de daño por el ataque de Cucurucho.​

    ...waiting…​


    Turno 2​

    John Pig invoca a San García y al Flaco Invisible en un conjuro sin precedentes.
    Detritos de luz iridiscentes acompañan este efecto. La Mariprosa comienza a girar las
    alas sobre su eje logrando así una inercia en su movimiento circular, la fuerza centrípeta
    se hace intolerable y dentella contra el aire como un frío vapor. Aleja así sus alas
    del centro de rotación mediante la velocidad tangencial, perpendicular al radio,
    en un movimiento circular…

    Cucurucho decide pasar su turno esperando
    la ofensiva.
    (lo bueno de ser el escritor)​

    …waiting…

    Turno 3​

    …los afilados movimientos de Mariprosa desprenden polvosas quitinas de sus alas
    que van a abrevar como mesocarpio de la fuerza centrífuga. O dicho más fácil, la
    aceleración centrífuga inducida por Mariprosa forma una esfera de energía
    recubierta por el polvo de las escamas de sus alas que brilla como greda
    volátil y lumínica. Una esfera dorada de energía.

    Una vez terminado el turno de Mariprosa, Cucurucho
    decide dejar pasar un último turno antes
    de disparar su flecha emponzoñada (pues Cucurucho también había
    estado usando las tandas para recolectar el maná necesario)(¿no lo sabían?).
    El problema radica eventualmente en mi haronía,
    o simplemente, en la carencia de apetito por describir las gesticulaciones de estos (dos)
    cuates.​

    …waiting…​


    0:15 de minuto
    (por si lo habían olvidado, ¿llegará Mariprosa a tiempo antes
    que desencadene el encantamiento?



    Turno 4​

    Mariprosa ataca. Se lanza abandonando guirnaldas en el aire en forma de canica ígnea
    y contra Goliat. Destella contra el parietal superior de Cucurucho y, como
    un crisol incandescente de granito y oro liquido, explota la sutura sagital saliendo
    por el hueso occipital.!Tremendo daño le has infligido a Cucurucho!, que
    zozobra malherido y paulatinamente cae.______Mariposa inflige 215 puntos
    de daño a Cucurucho pero pierde 50 puntos en resistencia (la perdida
    de quitina ha desprotegido sus alas).

    Cucurucho pasa a la prosa mientras un chorro de sangre
    se precipita hacia el légamo entre dos masas de aire en constante contraste térmico.​


    Un aroma a sándalo y a carne chamuscada perfora los perfumes de la tempestad. –“¡Huiré, está bien, esta vez has ganado Mariprosa, más antes, recibirás la saeta ponzoñosa desde mi boca!, perjura el Cuervo . En ese instante, mientras desfallece en el aire, Cucurucho da vuelta su cabeza y abre las aristas de su vértice áulico y bucal hasta proporciones opuestas,!que sorpresa fue para Mariprosa!, cuando desde la cuervera también llamada boca, un Talismán Hiperbóreo refuljo emitiendo un extraño albor .

    El Talismán
    invoca
    un fantasmagórico drakkar
    que se centra
    y
    perfora
    el ala endeble
    de
    Mariprosa.


    ¡Ayyyyyyy…., !Ahora entiendo la sabiduría del Rey Bharat!, lo
    que te aquejaba, Apironthe, no era más
    que un mezquino y quimérico
    drakkar
    ( ¡un dragón islandés!)​

    Sí, un dragón islandés. Es lo que es.



    Sobre el légamo
    en el cual
    las gotas de sangre de corneja
    fueron
    a dar
    han germinado Venus atrapamoscas
    Nepenthes (¡y no nepentes!) Cephalotus
    Cucuruchos
    Drosera, Byblis, Drosophyllum
    pues es sabido
    que Cucurucho
    es descendiente
    de
    carnívoras
    y
    de
    omnívoras.

    220 puntos de daño inflige Cucurucho y genera nueva prole


    0:06 de minuto
    (un aguacero de garras retráctiles se ciñe sobre el campanario)​


    Mariprosa​

    agoniza mientras el favonio le da lugar al cierzo nocturno
    que a su vez
    le unge la cara en claridad.
    Mariprosa agoniza, agoniza y se desploma, convulsionando
    y escupiendo rastros serpentarios de sangre
    que se abaten
    como un salmo insectifugo.
    Mariprosa vislumbra la cavidad del sombrero con el rabillo de su ojo izquierdo
    y agrupa todas sus fuerzas en un vano intento
    por dirigirse
    mediante su último aliento.​

    -¡Pero no! ¡Pero no! El rosa es sólo un color, aquí tampoco
    habrá finales ni gratitud.



    Mariprosa cae, el tiempo se acaba, desciende y se estrella
    contra el ala
    del sombrero. Se arrastra ¡repta como los vahos sepulcrales
    en las bocas de tormenta! El tiempo se acaba…!Apúrate
    apúrate Mariprosa llega y sumérgete en el
    agujero! Le faltan centímetros, le faltan centímetros,
    está apunto de lograrlo. Pero el tiempo se acaba, el tiempo se pasa,
    EL TIEMPO
    …tic- tac- tic- tac …
    nunca existió: 0:00 de minuto- silencio y oscuridad.











    (Volveré, y seré lumbrera.)



    *Reseña:

    *Alteregos:
    -Apironthe IV es el Maharajá de Berucia (actual Sikim), y líder de la resistencia contra los evangelizadores ingleses de la Más Elevada Orden de la Estrella de la India. Tiene su nacimiento en el poema “Apironthe IV”, y aparece como invitado en otros (A un sol hermoso…, Algún día tendremos que dejar de escribir, etc...)

    -John Pig es un aventurero irlandés que viaja con su covallo ya que el dinero no le alcanzó para comprar un caballo. Salva a Api de lo Necróforos y nace en el poema “ Las Puertas de la Serpiente Percepción en Tiempos Contemporáneo- Pasado”, participa también en el poema “Algún día tendremos que dejar de escribir” y quizás en algunos más.

    *Animales Místicos
    -Mariprosas y Cucurucho, nacen en el poema “Mariprosa I” y “Mariprosa II”.

    *Henry Michaux, escritor francés.

    *Rey Bharat, antiguo rey sagrado.

    *Maldoror o mal de auroras, personaje ficticio de Isidoro Duccase.
     
    #1
  2. KiRa

    KiRa Invitado

    Realidad, ficción, un viaje que no llega a terminar, otro que no pudo empezar. El calor nos vuelve humano, uno comienza a vacilar interpretaciones que quizás carecen de coherencia pero que se van afiansando a medida que uno agudiza el ojo de los sentidos.
    Un delito no haber pasado por su pintoresco arte.

    K
     
    #2
  3. Solsticio de primavera

    Solsticio de primavera Poeta fiel al portal

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    gracias por haber pasado y dejado tu huella. sé que lo largo siempre genera tedio, aun antes de empezarlo, por eso, buenisima onda la tuya!


    Saludos

    Api
     
    #3

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