Hay un lugar...

Hay un lugar donde el flujo de mi presente se encuentra con nuestro pasado

y las tranquilas aguas de ayer bañan mis pensamientos.

Sobre la orilla de un otra vida nacen los dulces flores de mi enamorado

que me regalaba cada vez floreciendo mis sentimientos.

Hay un lugar donde es posible sentir el murmullo de nuestros sueños

que en días lejanos aumentaban las emociones

de dos almas que se reunían en un inmenso mar.

Hay en ese lugar la fugaz memoria de cuando eramos los dueños

de un entero mundo de expectaciones

donde la única razón para vivir era amar.

Hay un lugar en el fluir de mi corazón que llora por algo

y que perturba las aguas serenas de mi ser.

Hay en ese lugar los fantasmas de dos almas que lloran por algo

que tantos días atrás brillaba sobre las aguas de sus seres.

Es un lindo lugar que encontré en el solitario camino de esta vida

esperando la razón para empezar mi gran salida.

Hacia algo que otra vez me deja nadar en las aguas de la felicidad

llevándome lejos de la oscuridad.

Hay un lugar donde un corazón lata por ti y espera

el día en que nuestras almas se reúnen en este tierra.

 

Encontrar esos lugares , es encontrar el amor.. abrazos.

 

De nuevo, te leo y te releo. Supongo que las historias se repiten en sitios como este. Las vivencias se condenan a ser réplica de otras. Hay versos que siento casi propios de mi propia poesía y versares hace bien poco tiempo. Entonces, no sé si felicitarte por ello o condolerme contigo. Me encantan versos como este:

Hay en ese lugar los fantasmas de dos almas que lloran por algo

y otros que igualmente despiertan el gusto por la relectura:

Es un lindo lugar que encontré en el solitario camino de esta vida
esperando la razón para empezar mi gran salida.
Hacia algo que otra vez me deja nadar en las aguas de la felicidad
llevándome lejos de la oscuridad.

Yo creo que las situaciones que no se terminan de una manera lógica y humana, tampoco las mata el tiempo. Se condenan a repetirse en la memoria de quien la vivió, a través del repensar y macerar, como si fueses mieses al sol agostándose en la trilla del recuerdo. Me quedo absolutamente con ese final portentoso del poema, esas cinco últimas palabras, aludiendo a la preciosidad de la vida y su regalo para los que sufren. Un abrazo y bienvenida, espero leerte de nuevo.

Te dejo rep y abrazos