Horas de pasión

Al arribo, él con su tierna sonrisa
la halaga, ella muy coqueta lo recibe,
y con un dulce ósculo y tierno abrazo
se dan muestras de cariño

presto a su desnudez, se acuesta
en el lecho con pose sensual
dejando expuesto su cuerpo fornido,
ella lo detalla con ojos ávidos

picara y osada, se despoja tardo
le mira absorto su grácil figura,
con pasos sinuosos se acerca
lo mima, es correspondida

arrobados, a flor de piel
la excitación aflora,
sus cuerpos ardientes se funden
con deseos lascivos

gimen, suspiran y al unísono
dimanan los fluidos,
las paredes escuchan
los ahogados sonidos

esas horas apoteósicas o
no pasan a ser olvido,
y esperan ansiosos
el próximo encuentro,
para disfrutarlo a lo sumo.





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Bello y si, ciertamente se encontrará la forma de proponer y esperar un nuevo coincidir cuando el sentir es pleno.
Saludos.

 

Gracias por tus bonitas palabras, me alegra te gustó.Un abrazo