La buena esposa...

Ella:

La buena esposa....
esa que te parece horrorosa
que aparece realmente bella
en esa pagina que compartes con ella

El:

Que mentira es esa?

Ella:

Vestida en traje de cuero
tiene un estilo elegante y moderno
decoro especialmente la mesa
e hizo una gran cena para tu fiesta

El:

Que mentira es esa?

Ella:

La buena esposa....
ordenando y limpiando tus cosas
que hasta trabaja duro por fuera
para ayudarte a pagar las deudas

El:

No sabes de lo que hablas...

Ella:

La buena esposa....
haciendo dedicatorias donde te adora
siento una profunda y honda pena
porque duerme con un gran sinvergüenza

El:

Ella es una bruja celosa y pretenciosa
hace tiempo que ya ni se acerca o me toca
Despiertas mas sentimientos por ti
por todo lo que haces y amas en mi

Ella:

Aquí están juntos en la playa
muy abrazados y acaramelados
mientras tu vas y nos engañas
la buena esposa es la que te amaba
Por que no la traes a mi presencia
para que sepa lo que dices a su ausencia?

 

El poema expone un enfrentamiento verbal en el que una mujer le reclama a un hombre su infidelidad. La “ella” va enumerando las virtudes de la esposa ―trabajadora, dedicada, que cocina, ordena, apoya económicamente y le demuestra amor― pero lo hace con ironía y dolor, porque al mismo tiempo sabe que ese hombre la engaña.

El “él” responde negando esas virtudes y descalificando a la esposa, llamándola celosa, bruja, que ya no lo toca. Sin embargo, la voz femenina lo contradice mostrando pruebas (fotografías en la playa, abrazos, engaños), y termina afirmando que la verdadera “buena esposa” fue la que lo amaba de verdad, no la que ahora se presta al engaño.

La intención es mostrar la hipocresía y las contradicciones dentro de una relación. La “buena esposa” que socialmente aparece como ejemplar, en la intimidad se revela como una máscara que oculta engaños y traiciones.
La poeta denuncia:

El engaño y la doble vida de la pareja.

El dolor y resentimiento de quien sufre la infidelidad.

El contraste entre la apariencia (la esposa perfecta en público) y la realidad (la traición en privado).


En resumen, la poeta quiere decir que esa figura idealizada de “la buena esposa” se convierte en símbolo de mentira, porque detrás de ella se esconde un hombre que traiciona y una relación marcada por la falta de sinceridad.