La mentira denostada del corazón.

Y del huevo rubor del celo
su maquillaje erosiona el verde
pudrir que en los horizontes
rescatan, las gaviotas.
La columna de siervos con delantal.
Traen sin senos el paraíso que es menos paraíso
con
la ilusión rebozada de licor de jazmín
múltiplo roto del dolor la sombra es el mismo oscuro rompe-nieves que echa a un lado el eco de la negritud.
los zulos del odio
hacen que los columpios
pierdan la balanza de su infancia
clamor cuando destinos de llanura abren un pellizco
candente que florece como delator
la llegada con asfixia come la inteligencia
sembrada a lo largo de toda una vida
de curiosidades donde tu vagón cumple con inercia la mentira denostada.
Del corazón.




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