La paciencia de las madres

Añada yugular que en vena diseña el río campista transportando el sueño a un lujoso confort.
Piel de martillo siempre percutiendo en la portería goleada del amor.
Los cancerberos ocultan la voluntad con sellos de dinamita
su coleccionable de selección
reaviva cantera transformada
en deserción, las válvulas de la picardía mutilan la inocencia explotando su virtud en un mar
Infestado de tiburones nómadas.
donde sobrevivir es un deseo sin cumplir, que cada día lleva al límite la paciencia de las madres.



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Una maravilla tus poemas amigo Victor... los disfruto. Saludos, que vaya todo muy bien.

 

Gracias tribuzen por tus agradables comentarios un fuerte abrazo.