Los candados muertos

Se me agota la conciencia
en esa jurisprudencia
de mantener los ojos cerrados
es que este absurdo candado
que ha cerrado la divina
libertad que no es vecina
del dinero encandilado,
es que me han arrollado
en sus panfletos perversos
de poner en manifiesto
un patrón desencajado
de una vida que aglutina
las horas hechas años
de perder mis celosías
de vivir sembrando en alto
sin cadenas reprimidas
que adormecen en llanto.

Se me agota la paciencia
en esa forma perversa
de vender el cielo yodado
en este absurdo candado
que niebla las bajezas
convertidas en riquezas
de los sabios entrenados
para lograr las tibiezas
de las mentes celestinas
que se pierden en rebaño,
no se mira rebeldía
sumisión entre los pastos
la conciencia me extermina
entre los espinos cardos
la represa reprimida
renueva muertos los candados.