Mi amiga Dona.

Dona duerme.

Dona vive cobijada
bajo la piel de una pera,
fruta que la desespera
por no ser atemperada.
Dona sueña estar casada
con el frutero de enfrente
que parece diligente
y de amor no sabe nada.

Dona quiere ser princesa
en un país encantado
con un príncipe azulado
ahijado de una condesa.
Dona suele verse presa
entre barrotes huraños
que se agrandan con los años
y su aprieto nunca cesa.

Dona sale por turrones
en agosto y primavera,
nunca encuentra turronera
que se avenga a sus razones.
Dona y sus cavilaciones
viajan sin más equipaje
que viajar por ir de viaje
sin más consideraciones.

Dona sufre la demora
de un reloj vencido y viejo
que escondido tras su espejo
con arrugas la decora.
Dona se torna señora
persuasiva y majadera
que se engaña la primera
con maldad demoledora.

Dona despierta.

Dona apura cada instante
con su príncipe frutero,
ha cambiado de casero
pues su pera no es bastante.
Dona habita colindante
al jardín de los ensueños,
Dona es sueño de mis sueños...
¿No es su historia edificante?

 

Muy edificantes tus octavillas mi estimado Maktú, nunca dejas de sorprenderme con tus poemas. Te agradezco como siempre que me otorgues el placer de leerte.

Saludos y buena vibra XD

 

Brillante, excelente diría yo amigo Maktú. Que sonoridad de cadencia describes con tus versos. Magistral me parece tu composición. Saludos amigo y gracias por dejarnos a todos esta perla literaria.

 

Dona quiere vivir la vida, no pasar inadvertida, quiere vencer al espacio, Dona quiere aprovechar los quereres, quiere sentir las emociones que le corren por las venas, bello poema Maktú, bellos sentimientos que me llegan de tu lindo poema, un abrazo fuerte amigo

 

Tlilmikiztli, el placer es enteramente mío por ser leído. Amables palabras amiga. Saludos y muchas gracias.

 

Muchas gracias aniksun por tu encendido halago hacia Dona. Te saludo agradecido.

 

Abrazo para ti acrecentado querida Mayca. Gracias por tu amable comentario.